El presidente Andrés Manuel López Obrador planteó utilizar 12,200 millones de dólares para el pago adelantado de deuda a través de recursos que otorgará el Fondo Monetario Internacional (FMI) como parte de la inyección de los Derechos Especiales de Giro (DEG), sin embargo, el plan violaría la autonomía de Banxico.
Los recursos que otorgará el FMI van directamente al Banco de México (Banxico) para que los administre y formen parte de las reservas sin que sean propiedad del banco central y del gobierno.
Durante su conferencia del miércoles, AMLO dijo que son “créditos a tasas bajas” y lo utilizarían para adelantar el pago de la deuda.
En el caso de México, le corresponden alrededor de 12,000 millones de dólares, este es un recurso que va al Banco de México para las reservas; nosotros podríamos utilizar ese recurso para que no esté sólo en reservas (…) entonces nosotros podríamos utilizar esos recursos para pagar deuda por anticipado,
dijo AMLO
Este plan violaría la autonomía de Banxico, pues en la Constitución se estipula que el gobierno no puede solicitar recursos al banco central.
De acuerdo con el artículo 28 de la Carta Magna, “el Estado tendrá un banco central que será autónomo en el ejercicio de sus funciones y en su administración (…) Ninguna autoridad podrá ordenar al banco conceder financiamiento”.
Además, en el artículo 20, fracción IV de la Ley de Banxico se indica que los derechos especiales de giro del FMI formarán parte de las reservas.
Tras las declaraciones de AMLO, el subgobernador de Banxico, Gerardo Esquivel, dijo que los DEG son reservas y por ley no pueden ser utilizadas para el pago de deuda.
Los derechos especiales de giro (DEGs) no son una moneda, son un activo de reserva internacional.
En México, por mandato de ley, los activos de reserva internacional no se pueden usar para pagar deuda.
— Gerardo Esquivel (@esquivelgerardo) August 11, 2021
¿Qué son los DEG?
Los DEG son activos de reserva internacional y su valor se determina por una cesta de monedas conformada por el dólar estadounidense, euro, yuan chino, yen japonés y la libra esterlina.
Su creación data de 1969 y tienen el objetivo de complementar las reservas oficiales de los países miembros.
A inicios de agosto, la junta de gobernadores del FMI aprobó una asignación general por 650,000 millones de dólares que se traducen a 456,000 DEG, a fin de apuntalar la liquidez mundial en el proceso de recuperación económica.
Esta es una decisión histórica: la mayor asignación de DEG en la historia del FMI y una inyección de ánimo para la economía mundial en medio de una crisis sin precedentes,
dijo la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva
De acuerdo con Georgieva, estos recursos generarán confianza y promoverá la resiliencia y estabilidad de la economía mundial. La entrada en vigor será el 23 de agosto.
Del total de recursos, cerca de 275,000 millones de dólares se destinará a países de mercados emergentes y en desarrollo, incluidos países de bajo ingreso, según el FMI. Georgieva señaló que buscarán con los países más ricos la ruta de canalizar voluntariamente DEG a países pobres y vulnerables.
Otro ‘foul’ a Banxico
La idea del presidente López Obrador parece que será otro “batazo de foul”, pues finalmente la declaración topó con la autonomía del banco central.
En el pasado, la administración ha pedido recursos a Banxico, por ejemplo, cuando AMLO pidió la entrega por adelantado el remanente de operación de 2020 y que finalmente no sucedió ante la apreciación del peso frente al dólar.
También, a finales de año el Senador de Morena, Ricardo Monreal, propuso un proyecto para reformar la Ley de Banxico, en la que el banco central se vería obligado a comprar divisas que los bancos comerciales no pueden ingresar al sistema financiero.
Finalmente, el plan no prosperó, pero generó incertidumbre entre los inversionistas debido a la violación a la autonomía de Banxico.