Los precios del petróleo se desplomaron este miércoles por señales de una menor demanda de gasolina en Estados Unidos, en medio de un alza de contagios de COVID-19.

El contrato de noviembre del WTI de Estados Unidos retrocedió 4%, a 40.03 dólares por barril, y el Brent del Mar del Norte para entrega en diciembre perdió 3.3%, a 41.73 dólares, de acuerdo con MarketWatch.

Los inventarios de gasolina crecieron en 1.9 millones de barriles, a 227 millones de barriles, durante la semana terminada el 16 de octubre, mostraron cifras publicadas por la Administración de Información de Energía (EIA). Analistas esperaban un descenso de 1.8 millones de barriles.

Las existencias de crudo declinaron en un millón de barriles, a 488.1 millones, en línea con las expectativas. No obstante, los inventarios en el centro de distribución de Cushing, Oklahoma, aumentaron en 975,000 barriles.

El dato de la EIA contrastó con cifras publicadas por el Instituto Americano del Petróleo el martes, que indicaron un aumento de los inventarios petroleros, lo que provocó incertidumbre en el mercado.

La presión sobre los petroprecios se vio aumentada por el alza de casos de COVID-19 a escala mundial, que superaron los 40 millones el lunes, mientras varias partes de Europa impusieron nuevas restricciones para frenar su propagación.

Crisis obliga al sector petrolero a pensar en cambios

También continúan las negociaciones en Washington entre la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, y el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, sobre un nuevo paquete de estímulo.

La Casa Blanca y los demócratas en el Congreso de Estados Unidos se acercaron el martes a un acuerdo sobre el nuevo paquete de ayuda para aminorar el impacto de la pandemia, dijo el principal asesor de Pelosi.

En el lado del suministro, el ministro de Energía ruso, Alexander Novak, dijo el martes que es demasiado pronto para discutir posibles rebajas de producción más allá de diciembre, menos de una semana después de decir que deberían ponerse en marcha planes para aliviar la actuales restricciones al bombeo.

La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y sus aliados recortan 7.7 millones de barriles por día desde agosto y luego empezarán a moderar esta disminución a 2.2 millones en enero, según su acuerdo.

Libia, que está exenta de los recortes pactados por la alianza, incrementó su producción después de que el conflicto armado que vive cerró casi todo el bombeo del país en enero, lo que está llevando más crudo a un mercado sobreabastecido.

Con información de Reuters