El gobierno de Vladimir Putin entregó a la Comisión Federal para la Protección de Riesgos Sanitarios (Cofepris) los materiales que se tienen hasta ahora relacionados con las pruebas clínicas de la vacuna rusa Sputnik V, contra COVID-19, de acuerdo con una nota de El Universal.
Víktor Kornelli, embajador ruso en México, dijo que entre ambas naciones existe un diálogo permanente respecto a la vacuna, que hasta el momento se encuentra en Fase 2.
Añadió que, como parte del desarrollo de la vacuna rusa, es esencial que México se sume al proceso y entre en Fase 3. De esta manera daría certeza de su seguridad y eficacia.
“La tarea primordial es finalizar de manera oportuna los ensayos clínicos de las vacunas desarrolladas por distintos países, así como facilitar y garantizar el acceso a éstas para la población en general”, comentó Kornelli.
La Fase 3, última en el proceso de aprobación de cualquier vacuna, involucra a más de 40,000 voluntarios para que se les aplique, razón por la cual fue extendida a México.
“Tenemos todos los fundamentos para considerar a la vacuna segura y eficaz. También participan otros países y ojalá México se sume en la fase tres”, comentó.
Añadió que Rusia está dispuesto a traer el antídoto a la región de Latinoamérica y en particular, a México.
Las conversaciones entre ambos países estuvo mediada por el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, así como por la Secretaría de Salud, Cofepris y el Consejo Nacional de la Ciencia y Tecnología (Conacyt).