Durante agosto, el pesimismo de los consumidores disminuyó principalmente en relación a los precios de vivienda, sin embargo en gasto anual, los ingresos de los hogares y las expectativas del mercado laboral siguen siendo débiles en comparación con el periodo anterior al COVID-19, reportó el Centro de Datos Microeconómicos de la Reserva Federal de Nueva York.
En particular, los consumidores de todos los grupos demográficos tienen una mirada más positiva del mercado de bienes raíces, que está siendo respaldado por las bajas tasas de interés, pues dijeron en agosto que esperan que los precios de las casas crezcan en una media de 2.8% respecto a igual periodo de un año atrás, por encima del 2% de julio y cerca del nivel promedio de 2019 de 3%.
Las percepciones sobre el mercado laboral fueron dispares. En un signo de optimismo, los consumidores dijeron que pensaban que tenían más oportunidades de encontrar un nuevo trabajo después de perder sus actuales cargo, con una posibilidad del 50.7% en agosto desde el 48.9% en julio, pero el resto de los consultados siguió muy por debajo del promedio de 59.9% de 2019.
Y la posibilidad que percibían de quedar desempleados en el próximo año se incrementó por segundo mes consecutivo a 18% en agosto, frente al 16% de julio y el 13.8% de febrero.
De acuerdo con los datos del banco el aumento fue más pronunciado entre los encuestados sin educación universitaria y aquellos con un ingreso familiar por debajo de 50,000 dólares, mientras que la probabilidad media de dejar el trabajo voluntariamente en los próximos 12 meses aumentó 0.8 puntos porcentuales hasta el 19.7% en agosto.