La crisis económica que ha generado la pandemia de coronavirus afectará la rentabilidad y capital de varios bancos a nivel mundial, hasta 2022, de acuerdo con un informe de Moody’s Investors Service.

A fines de 2022, muchos de los 268 bancos de Francia, Alemania, Italia, España, Reino Unido, Estados Unidos, Brasil y México, cubiertos por el modelo de la agencia, no habrán recuperado el nivel de capital que tenían cuando entraron en la crisis.

El deterioro promedio del índice de capital será más severo en Alemania, Italia, Brasil y México.

La mayoría de las economías no recuperarán la producción perdida para fines de 2022 y los niveles de capital disminuirán en muchos bancos

dijo Jorge Rodríguez-Valez, oficial senior de crédito de Moody’s, y coautor del informe.

“En promedio, los bancos en Italia, Alemania, México y Brasil pueden sufrir una moderada erosión del capital a fines de 2022. Para alrededor de la mitad de esos bancos, la disminución será de más de 100 puntos base. Por el contrario, las tasas de capital de los bancos en Francia, España, Reino Unido y Estados Unidos serán más resistentes”.

Los préstamos morosos (NPL, por sus siglas en inglés) serán significativamente más altos en 2022 que en 2019 en los ocho países. El aumento podría ser tan alto como 200 puntos base o incluso cerca de 300 puntos en bancos en Italia, España o el Reino Unido, pero la mitad de esa cantidad en Francia y Alemania.

Los modelos también proyectan que los NPL disminuirán significativamente en 2022 en Estados Unidos. Y a partir de 2021 en Brasil y México, donde la morosidad aumentará más rápido, pero también disminuirá más rápidamente que para sus pares.

A finales de 2022, la rentabilidad también será menor que antes de la recesión provocada por la pandemia.

En los mercados emergentes, los bancos mexicanos y brasileños tuvieron una fuerte rentabilidad antes de que estallara la crisis del coronavirus. Sin embargo, estos bancos tradicionalmente tienen niveles muy altos de pérdidas crediticias (2.8% y 2.2% en Brasil y México respectivamente en 2019, como porcentaje de los préstamos brutos).

El informa también indica que, si los costos de aprovisionamiento aumentaran en la misma magnitud que la depresión económica parece sugerir, eso implicaría pérdidas de alrededor de 4% del total de préstamos en promedio durante el período, lo suficiente como para que estos bancos estén cerca del punto de equilibrio en 2020.