Brasil restableció los datos detallados sobre COVID-19 en su sitio web nacional, tras la controversia sobre el retiro de los totales acumulados y un dictamen del Supremo Tribunal Federal de que se debía volver a publicar el conjunto completo.

La medida respondió a una creciente presión política y declaraciones de que el gobierno intentaba enmascarar la severidad del brote, ahora el segundo mayor del mundo.

Según datos del martes por la tarde del Ministerio de Salud, Brasil registró 32,091 nuevos casos de coronavirus para un total de 739, 503, tan sólo superado por Estados Unidos. Además, contó 1,272 muertes con lo cual alcanzaron la cifras de 38,406 fallecidos. 

El fin de semana, el  Ministerio de Salud retiró abruptamente los datos acumulados de casos de coronavirus y muertes, lo que causó indignación en todo el espectro político. 

La semana pasada, retrasó la publicación de los números hasta tarde en la noche, luego de que se emitieran los principales programas de noticias de Brasil.

Los expertos en salud temían que al no publicar los totales acumulados y sólo divulgar las muertes que ocurrieron en las últimas 24 horas, los casos que dieran positivo por coronavirus días después de la fecha de muerte podrían desaparecer de la vista del público.

El ministerio debe restablecer completamente la divulgación diaria de datos epidemiológicos sobre la pandemia de COVID-19, incluso en el sitio web del organismo, en los términos presentados hasta el jueves pasado

 dijo el juez Alexandre Moraes en una declaración publicada en el sitio web del máximo tribunal del país

El presidente Jair Bolsonaro ha minimizado constantemente la severidad del coronavirus; ha instado a los gobernadores a revertir las medidas de confinamiento que afectan a la economía del país.

El pasado viernes dijo que la Organización Mundial de la Salud (OMS) perdió credibilidad en su manejo de la pandemia y que Brasil podría retirarse del organismo internacional.

Los comentarios de Bolsonaro llegan días después de que el presidente Donald Trump anunció el quiebre de Estados Unidos con la OMS, luego de acusar a la organización de actuar a favor de China.