Apple anunció que invertirá cerca de 1,000 millones de dólares para expandir sus operaciones en Austin, Texas, con la construcción de una segunda sede capaz de recibir a 15,000 empleados adicionales.
“Con esta nueva expansión estamos redoblando nuestro compromiso de cultivar el sector de alta tecnología y la fuerza laboral en todo el país”, dijo en un comunicado el CEO de Apple, Tim Cook.
Después de su sede en Cupertino, California, Austin acoge las oficinas más grandes de Apple más grande, con 6,200 empleados laborando en el actualmente, detalla Bloomberg.
La ampliación de sus instalaciones en Austin convertirá a Apple en el principal empleador privado de esta ciudad.
La compañía también dijo que se establecerán otras instalaciones en Culver City, Seattle, y San Diego. Las instalaciones existentes en Pittsburgh y Boulder se ampliarán en los próximos tres años.
El fabricante del iPhone aseguró que ha agregado 6,000 empleos a su fuerza laboral en Estados Unidos en lo que va del 2018 y afirmó que creará 20,000 empleos en todo el país para 2023. La compañía actualmente emplea a 90,000 personas en los 50 estados del país vecino.
Al inicio de este año, la compañía también se comprometió a invertir 350,000 millones de dólares en la economía de EU en cinco años y el anuncio de hoy es parte de ese monto,
Reacciones ante guerra comercial
Diversas multinacionales de Estados Unidos han enfrentado presiones políticas para aumentar las inversiones en el país como parte de las políticas impulsada por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que han llevado al país a una guerra comercial con China.
El mandatario también ha advertido sobre aranceles para los iPhones y otros productos de Apple importados por China.
Amazon terminó el mes pasado una búsqueda de meses para levantar una nueva sede, seleccionando Nueva York y Virginia para construir sus oficinas en las que planea ubicar los miles de puestos de trabajo que se comprometió a crear.
A consideración de Bloomberg, la expansión de las tecnológicas como Amazon y Apple puede ser una respuesta a las políticas actuales de Trump, en el marco de su guerra arancelaria con China.
Durante su campaña, el mandatario prometió traer empleos de manufactura a su país desde Asia y las empresas han incrementado sus esfuerzos para contratar personal localmente para evitar conflictos.