El CEO de Facebook, Mark Zuckerberg y el CEO de Twitter, Jack Dorsey, fueron convocados nuevamente por el Senado de Estados Unidos para comparecer sobre el papel de las redes sociales en el debate público de ese país.

Esta reunión es la segunda que tienen los directores ejecutivos de ambas compañías en menos de un mes. La ocasión anterior comparecieron junto al CEO Google, Sundar Pichai.

Durante su turno, Dorsey, dijo que Twitter no ha moderado los mensajes relacionados con las elecciones en función de prejuicios contra los conservadores, contrario a lo que afirman numerosos republicanos.

“En el período previo a las elecciones de 2020 hicimos mejoras significativas a nuestras políticas para proteger la integridad de la elección”, dijo Dorsey.

Adjuntamos notificaciones para dar contexto y limitar el riesgo de que se difundiera desinformación peligrosa para la elección (…) porque el público nos dijo que quería que nosotros diéramos esos pasos

añadió.

La Comisión Judicial del Senado, bajo control republicano, quiere tratar “la gestión de la elección de 2020” y la “censura” de la que el presidente Donald Trump y sus aliados se consideran víctimas.

Las reglas de la red social la han hecho señalar múltiples tuits de Trump, seguido por casi 89 millones de usuarios y quien se ha negado a conceder la victoria al demócrata Joe Biden, señalando -sin pruebas- que ocurrió un fraude en su contra.

Una nota que dice “Esta afirmación sobre fraudes electorales es disputada” ha sido colocada en numerosas publicaciones del mandatario estadounidense en Twitter.

Twitter, Facebook y otras plataformas han enfrentado gran presión para retirar contenidos que pueden ser considerados desinformación peligrosa, pero al mismo tiempo ha recibido reclamos por supuestamente suprimir ciertas posturas políticas.

Dorsey asegura que su empresa sigue buscando el equilibrio.

“Queremos ser muy claros en que no consideramos que nuestro trabajo en esta área esté ya hecho. Nuestros equipos están aprendiendo y mejorando cómo abordamos estos retos y nos ganamos la confianza de la gente que usa Twitter”, dijo Dorsey.

Tras las declaraciones de Dorsey, tocó el turno de Zuckerberg, quien dijo que Facebook no es adictivo.

Ciertamente no diseñamos el producto para que sea de esa manera (adictiva). No queremos que nuestros productos sean adictivos

dijo Zuckerberg, citado por CNN.

Al respecto, el senador senior, Lindsey Graham dijo que está cada vez más preocupado por las investigaciones que sugieren que puede haber un problema de salud pública asociado con las redes sociales, trazando paralelos con la industria tabacalera.

Zuckerberg rechazó la postura del senados y dijo: “No creo que la investigación haya sido concluyente”, pero agregó que es un área que a la compañía “le importa”. Por ejemplo, dijo que el equipo de Facebook que administra el servicio de noticias no tiene datos sobre cuánto tiempo dedica la gente a sus productos.

Facebook también pone etiquetas en publicaciones relacionadas a las elecciones de Estados Unidos

Adiós al trato especial

Las cuentas de redes sociales del presidente Donald Trump dejarían de tener un trato especial una vez deje el cargo, coincidieron Zuckerberg y Dorsey.

Facebook y Twitter tienen políticas que permiten a los funcionarios electos y a los líderes mundiales, hacer afirmaciones en sus plataformas que de otro modo violarían las políticas de las empresas. Pero una vez que Trump deje el cargo, ya no será elegible para ese tratamiento especial.

“Si una cuenta ya no es líder mundial, esa política en particular desaparece”, dijo Dorsey, citado por CNN.

En general, la gran mayoría de nuestras políticas no tienen valor periodístico ni excepciones políticas. Si el presidente está difundiendo discursos de odio o promoviendo la violencia … esos recibirán el mismo trato que cualquier otra persona que diga esas cosas, y ese seguirá siendo el caso

dijo Zuckerberg.

Con información de AFP