Lyft dijo este martes que está trabajando en un servicio de entregas de alimentos a domicilio, para tomar parte de este negocio que ha resultado altamente relevante para su competidor Uber durante la pandemia.

Los ingresos de la compañía de viajes compartidos cayeron 48% anual, a 499.7 millones de dólares, lo que representa un alza de casi 50% respecto a lo registrado en el segundo trimestre del año y un resultado superior a los 486.5 millones de dólares esperados por el mercado.

La recuperación del negocio y los planes de expansión de Lyft provocaron que sus acciones subieran casi 6% en las operaciones tras el cierre del mercado.

“Lo que estamos escuchando de los restaurantes es que están buscando un socio que no les cobre una comisión de 30%, pero aún le ofrezcan un servicio de entregas”, dijo John Zimmer, presidente de Lyft, a Reuters en una entrevista previa a la presentación de los resultados.

Esto ofrecería un ingreso adicional a los conductores, dijo el ejecutivo, aunque los trabajos aún están en sus etapas iniciales.

Las pérdidas netas en el tercer trimestre crecieron a 459.5 millones de dólares, frente a los 463.5 millones del mismo lapso de 2019.

Según la empresa, alcanzará la rentabilidad ajustada hacia el final de 2021, gracias a presupuestos estrictos y un recortes de costos y afirma que logrará esta meta incluso si los viajes permanecen entre 5% y 10% por debajo de los niveles prepandemia.

Aunque las acciones de Lyft subieron en días recientes, impulsadas por la esperanza de que la vacuna contra el COVID-19 llegue en el corto plazo y el éxito de la Propuesta 22 en California, acumulan un retroceso de 15% en el año y cotizan a 50% de su precio de debut en 2019.