Lotería Nacional (Lotenal) informó que desde hace dos semanas detectó una sustracción de información en su área administrativa por parte de delincuentes internacionales, informó la institución.

Además, Lotenal dijo que de inmediato se avisó a la Policía Cibernética y que en todo momento ha contado con asesoría y apoyo de la Coordinación de Estrategia Digital Nacional (CEDN) de Presidencia de la República y con apoyo directo de personas expertas en la materia.

Cabe destacar que se ha iniciado la gestión de un programa de modernización de los sistemas informáticos y se cuenta con respaldo de la información en todas las áreas

 dijo Lotenal en un comunicado

Según la institución, los concursos y sorteos que realiza no se vieron afectados y operan con normalidad; igualmente, está garantizado el pago de premios. 

El pasado 27 de mayo, Hiram Camarillo, director y fundador de la firma de ciberseguridad Seekurity, compartió en su cuenta de Twitter que el grupo Avaddon anunció que Lotenal era una de sus nuevas víctimas. 

Contamos con datos como contratos y convenios de 2009 a 2021, docs legales, correspondencia, finanzas, datos notariales, outsourcing, y mucho más

 dijo Avaddon

Días después Avaddon volvió a publicar que Lotenal no comprendía la seriedad de la situación y el querer ocultar que fueron hackeados empeoraba la situación.

“El hecho de querer ocultar que fueron hackeados y les robaron info, que tal si les decimos que tenemos información de acoso sexual en el lugar de trabajo, incidentes desagradables”, publicó Avaddon.

Como muestra de los documentos de acoso sexual, los atacantes publicaron un escrito donde una trabajadora de limpieza denuncia el acoso sexual que vivió dentro de Lotenal.

Además, los ciberdelincuentes tienen posesión de contratos, convenios, finanzas y correspondencia del periodo 2009-2021. Algunos de los documentos filtrados tienen el membrete de la Lotería Nacional, Pronósticos Deportivos para la Asistencia Pública y la Secretaría de Hacienda (SHCP).

Avaddon dio 240 horas a Lotenal para ponerse en contacto, pagar el rescate y obtener el software que les desencriptaría la información secuestrada.