El debilitamiento de las finanzas públicas, sumado al riesgo de un mayor apoyo extraordinario a las empresas estatales Pemex y CFE, podría conllevar una rebaja de la calificación crediticia en los próximos dos años.
El consorcio chino-portugués multiplicó su negocio en México con obras estrella de la 4T, desde el Tren Maya hasta aeropuertos y autopistas, pese a los señalamientos por sobrecostos e irregularidades.
Actualmente, en la zona baja solo operan dos elevadores en los pisos impares del 1 al 17, mientras que en la zona alta, entre los pisos impares 33 y 34, funciona únicamente un elevador.
La calificación podría disminuir si se presentan cambios en la política energética que reduzcan el respaldo del gobierno federal, o si una caída prolongada en el precio de la mezcla mexicana y el deterioro de los indicadores operativos afectan los ingresos de Pemex.