Reforma laboral a trabajadores de Uber, Rappi y DiDi, un dilema entre derechos y flexibilidad
La propuesta de reforma laboral para regular el trabajo en plataformas digitales debe “garantizar derechos sin sofocar las flexibilidades”, dijo Cristina Zoé Gómez Benavides, del Instituto Mexicano de Contadores Públicos (IMCP), en un evento celebrado este miércoles.
Esta misma mañana, conductores y repartidores de aplicaciones como Uber, Rappi y DiDi se manifestaron preocupados por el impacto que esta medida podría tener en sus ingresos y autonomía laboral.
Desde las primeras horas de este 18 de junio, los trabajadores se concentraron en las calles principales de la Ciudad de México, como Paseo de la Reforma y Circuito Interior. Los manifestantes reconocieron el valor de ser considerados legalmente, pero insisten en que no se debe sacrificar la flexibilidad que caracteriza su modelo laboral.
Durante una conferencia ofrecida por el IMCP, Gómez externó que el objetivo de la reforma: “No debe ser frenar la innovación, sino asegurar que el progreso tecnológico no se construya sobre la precariedad (…) regular no es frenar, es humanizar”.
¿Qué implicaciones tiene la reforma laboral?
Las personas que perciban al menos un salario mínimo mensual en la Ciudad de México por 8,480.17 pesos mensuales, deberán reconocerse como trabajadoras formales, con derecho a seguridad social y prestaciones mínimas de ley, como aguinaldo, vacaciones y participación en utilidades. Esto siempre que hayan laborado más de 288 horas al año.
Dicha medida forma parte de una regulación que busca ordenar un sector que por años ha operado al margen de las normas laborales básicas. Aunque las plataformas digitales han funcionado bajo esquemas de “socios” o “colaboradores”, la intención es reconocer que detrás del algoritmo hay personas que dependen de estos ingresos y que requieren regulaciones que los saquen de la precariedad.
Preocupaciones persisten
Los manifestantes, que incluyeron conductores y repartidores por aplicación, exigieron a la Secretaría de Gobernación (Segob) y a la Procuraduría Federal de la Defensa del Trabajo (Profedet) que aclaren cómo afectará la reforma sus condiciones económicas y operativas.
Por su parte, empresas como Rappi aseguraron estar comprometidas con el proceso. “Participamos activamente en las mesas de diálogo con la Secretaría del Trabajo y Previsión Social y el Instituto Mexicano del Seguro Social (…) El diálogo debe ser el camino para alcanzar consensos sólidos y sostenibles”, destacó la compañía a través de un comunicado, señalando que los trabajadores deben ser incluidos en la discusión.
Leer más: