Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán fue encontrado culpable de administrar una empresa criminal que introdujo ilegalmente toneladas de drogas a Estados Unidos y condenado a cadena perpetua, determinó un juez en una corte federal de Brooklyn este miércoles.

El juez de distrito Brian Cogan impuso la pena de prisión de por vida, más 30 años, lo cual es obligatorio según la ley estadounidense. Guzmán también deberá entregar 12,600 millones de dólares, dijeron fiscales.

En febrero, el Chapo Guzmán, de 62 años, fue encontrado culpable por un jurado de traficar toneladas de cocaína, heroína y marihuana y de liderar operativos de asesinatos múltiples como el jefe del Cártel de Sinaloa.

Según los fiscales, Guzmán vendió drogas con un valor de más de 12,000 millones de dólares y Forbes alguna vez lo incluyó en su listado de los hombres más ricos del mundo.

Antes de que se dictara la sentencia, Guzmán afirmó que su confinamiento equivalía a una “tortura mental” y aseguró que los jurados en su caso permitieron que los reportes de los medios de comunicación influyeran en su decisión, un argumento que también han utilizado sus abogados.

“Estados Unidos no es mejor que ningún otro país corrupto”, dijo Guzmán, agregando que los fiscales querían enviarlo a “una prisión donde nunca se me escuchará de nuevo”.

Durante el juicio, que duró 11 semanas, el público conoció cómo el Cártel de Sinaloa funcionaba casi como una empresa multinacional, gracias a las declaraciones de antiguos líderes, un especialista en tecnología y comunicaciones y hasta una de las amantes del capo.

Guzmán, quien ganó fama en la década de 1980 por la construcción de túneles en la frontera de Estados Unidos para transportar drogas, también utilizaba una flotilla de aviones y barcos para traficar los estupefacientes, llevaba registros contables minuciosos y empleaba un sistema de telecomunicaciones encriptado que corría en servidores secretos ubicados en Canadá.

El Chapo y sus fugas

Actualmente, Guzmán Loera se encuentra en confinamiento solitario en una cárcel en Manhattan. El mes pasado, el juez Cogan rechazó su solicitud de más tiempo para ejercitarse en el techo de la cárcel, luego que los fiscales argumentaron que podría escapar.

En 1993, fue capturado por autoridades mexicanas y escapó de la cárcel en 2001, escondido en un carrito de lavandería.

Durante los siguientes años, vivió escondido en las montañas de Sinaloa, protegido por seguridad privada, hasta que fue capturado nuevamente en 2014.

El año siguiente, realizó su fuga más conocida: escapó a través de un túnel de 1.6 kilómetros de largo, que iba del interior de su celda en la cárcel de máxima seguridad hasta un inmueble aledaño.

En enero 2016, fue recapturado y posteriormente extraditado a Estados Unidos para enfrentar el juicio en el que hoy se determinó que pasará el resto de sus días en la cárcel.

Con información de Reuters