En el Día Internacional del Trabajo, más de 5 millones de trabajadores mexicanos que no cuentan con contrato en Estados Unidos están completamente desprotegidos y ninguna instancia gubernamental puede ayudarlos.

Los principales problemas a los que se enfrentan los trabajadores mexicanos en el extranjero es al incumplimiento en el pago de salarios, así como a las indemnizaciones por accidentes laborales, según datos de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).

Sin embargo, la asistencia consular de la cancillería solamente está al alcance de los trabajadores registrados legalmente fuera del país y deja fuera a quienes se encuentran en el “mercado laboral gris” estadounidense.

“La red consular mexicana es muy basta para atender cualquier problemática de los mexicanos que viven en el extranjero, pero desafortunadamente deja fuera de protección a los trabajadores indocumentados”, dice Virginia Petrova, doctora en Derecho Internacional de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

Exportación laboral

Hasta 2017, la SRE tenía el registro de 12.1 millones de mexicanos dispersados por el mundo. Su principal destino es Estados Unidos, donde se contabilizaba el 97.5% de ellos, y le siguen Canadá, España, Reino Unido y Alemania.

Solo en Estados Unidos viven 5.2 millones de inmigrantes mexicanos “no autorizados”, según el centro de investigaciones Pew. A ellos no les puede dar apoyo el gobierno mexicano, a pesar de que suelen ser quienes enfrentan peores condiciones en materia laboral, dice Petrova.

“Ni siquiera existe un registro completamente confiable de los trabajadores indocumentados en Estados Unidos porque tienen mucho miedo de acercarse a las autoridades. Quien no cuenta con un contrato de trabajo, tampoco tiene derechos laborales ni protección”, explica la experta.

No obstante, más del 60% de los inmigrantes mexicanos registrados tienen actividades laborales en sus países de destino. El 35% de las personas viven fuera del país tienen un perfil ocupacional como profesionistas, el 11% como empleados de distintos oficios y el 14% reportó desarrollar actividades productivas sin especificar.

El organismo encargado de atender cualquier controversia que requiera la asistencia de las autoridades a cualquier ciudadano mexicano en otro país es la SRE. Para ello, la dependencia cuenta con la Red de Consulados de México (RDCM).

De acuerdo con dicho organismo, en 2018 se atendieron 4,635 casos de apoyo a mexicanos por recuperación de salarios no pagados, 2,994 indemnizaciones por accidentes y enfermedades adquiridas en centros de trabajo, 1,258 violaciones de derechos laborales, 733 casos de discriminación laboral y 269 de trata laboral.

De los 9,889 casos de asistencia que registró la SRE en materia laboral, el 96.8% se atendieron en Estados Unidos y solo el 3.2% en otros países. Pero esta cifra solo representa el 0.19% de los trabajadores indocumentados que se encuentran en territorio estadounidense.

Pese a ello, la RDCM está centrada en dicho país, principalmente en la zona sur, donde se registra la mayor presencia de inmigrantes mexicanos.

Maltrato nacional

México es considerado uno de los países con peores condiciones laborales, y la principal problemática a la que se enfrentan los trabajadores es a la violencia y a los despidos injustificados, según datos de la Confederación Sindical Internacional (CSI) y del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi).

Un estudio publicado en 2018 por la CSI coloca a México entre los peores países del mundo para los trabajadores y trabajadoras.

Según el Índice Global de los Derechos del organismo- que evalúa restricciones a la libertad de expresión, protestas, ataques a defensores de los derechos de trabajadores -, el trabajo decente y los derechos democráticos se debilitaron prácticamente en todos los países en 2017 y México está entre los que no garantizan respeto a derechos laborales.

En esta lista, las condiciones de trabajo en México son equiparables a las de países que en los últimos años han enfrentado conflictos armados, como Turquía, Irán, Colombia y Ucrania.

Asesinatos a representantes sindicalistas, violencia física, amenazas de muerte e intimidación son algunas de las características que contempla la CSI para elaborar este estudio.

En materia de derechos laborales, los despidos injustificados son la principal problemática a la que se enfrentan los trabajadores en el país.

En 2017, las juntas locales de conciliación y arbitraje reportaron la atención de 229,464 conflictos de trabajo, de los cuales el 99.1% fueron casos individuales y solo el 0.9% de carácter colectivo, según los datos publicados por el Inegi el año pasado.

El 92.9% de los conflictos individuales tuvieron como motivo la demanda por despido injustificado, mientras que el 84.5% de los colectivos tuvieron como motivo la disputa por la titularidad de contratos, indica el organismo estadístico.

“La gran mayoría de demandas laborales en México se establecen por despidos injustificados, pero también existen inconformidades por salarios, horas extra o el pago de otras prestaciones que se adeudan, aunque esos casos no siempre llegan a las salas de conciliación y arbitraje”, dice Alfonso Bouzas.

Sin embargo, reitera el experto, la reforma laboral impulsada por el gobierno de Andrés Manuel López Obrador en el papel busca favorecer la mejoría de las condiciones laborales en el país, aunque su implementación, calcula, puede demorar hasta cinco años.

“Lo más complicado será implementar los instrumentos de resolución de conflictos que sustituirán a las juntas de conciliación y arbitraje. Podría tardar hasta 2023”, concluye el experto.