#InformaciónConfidencial: El apoyo llega a Pemex y CFE, pero desde diferentes trincheras
Las dos principales empresas del Estado, Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE), han logrado conseguir recursos para cumplir con sus objetivos en el corto plazo, los cuales, sobra decir, son tan diferentes como sus fuentes de ingresos.
Mientras que la encargada de generar la mayor parte de la energía del país obtiene créditos por cantidades importantes sin tanta dificultad, la petrolera dirigida por Víctor Rodríguez Padilla subsiste gracias a los recursos que el Gobierno de México le otorga a través de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.
Esta semana, la empresa encabezada por Emilia Esther Calleja Alor recibió un crédito por 300 millones de dólares (mdd) por parte del Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe (CAF), el cual se destinará principalmente a fortalecer la infraestructura eléctrica del país.
Los expertos aseguran que la CFE tiene una urgencia por mejorar la transmisión y la distribución y para ello es necesario incrementar la inversión en infraestructura.
En la conferencia matutina de la presidenta Claudia Sheinbaum de este miércoles, 17 de diciembre, la directora de CFE informó que están invirtiendo 4,328 mdd en cinco proyectos estratégicos que forman parte del Plan de Expansión 2025-2030.
Pemex tiene un panorama menos claro
A diferencia de la CFE, Pemex no requiere el efectivo sólo para mejorar sus operaciones, sino para ser rescatada de las fuertes deudas que atraviesa, lo que dificulta su acceso a créditos de forma directa y la coloca en la necesidad de recibir recursos por parte del Gobierno Federal.
De acuerdo con el Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF), el Gobierno de México ha inyectado a la petrolera 150,000 mdd, sin embargo, no han sido suficientes al mantenerse los problemas financieros, con deudas altas y vencimientos en el corto plazo.
La presidenta Sheinbaum Pardo ha buscado dar mayor certidumbre sobre el estado de la empresa asegurando que para 2027 será sustentable financieramente, pero ningún especialista lo ve como un escenario probable.
Pemex parece estar confirmando los comentarios de que se ha convertido en un ‘barril sin fondo’ que absorbe los recursos del país al ser uno de los pilares de la autosuficiencia energética que tanto han prometido los gobiernos de la Cuarta Transformación y hasta el momento han arrojado pocos o nulos resultados.
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