Volkswagen anunció su intención de sacar a bolsa la marca de coches deportivos Porsche, lo que si bien podría convertirse en una de las mayores salidas a bolsa del mundo, el anuncio se da en un escenario en el que los mercados están nerviosos por la inflación récord y la disputa energética entre Rusia y Europa.
El fabricante de automóviles alemán hizo pública su intención de salir a bolsa para realizar una Oferta Pública Inicial (OPI) para finales de septiembre o principios de octubre, la cual se completaría a finales de año.
La iniciativa de cotizar en Frankfurt se anunció después de que el Consejo de Supervisión de Volkswagen diera el visto bueno a última hora de este lunes.
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Valoración roza hasta 85,000 mdd
Los inversionistas esperan una valoración de entre 60,000 y 85,000 millones de euros. En el extremo superior de las estimaciones, la Oferta Pública de Venta (OPV) podría ser la mayor de la historia de Alemania y la mayor de Europa desde 1999, según datos de Refinitiv.
Volkswagen dijo que una OPV sería un paso importante en la transformación de la empresa, mientras pretende convertirse en un proveedor primordial dentro del mercado de movilidad mediante software.
Catar será uno de los principales inversionistas que se comprometerá a adquirir una participación del 4.99% en la nueva empresa cotizada, dijo Volkswagen.
La intención de salir a bolsa incluía una oferta a inversionistas minoritarios en países de Europa, como Francia, España e Italia, en un intento de aprovechar la fiel base de seguidores de Porsche.
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Nuevo rumbo
Con la venta de acciones, el multimillonario clan Porsche y Piech recuperaría la influencia directa sobre lo que solía ser su empresa familiar, unos 13 años después de que se vieran obligados a vender el negocio de los coches deportivos a Volkswagen.
Hace más de una década, Porsche Automobil Holding SE intentó hacerse cargo del control del Volkswagen, mucho más grande, pero fracasó cuando el financiamiento se agotó durante la crisis financiera.
Mientras que recuperar más influencia sobre Porsche está en las cartas de la familia, Volkswagen espera producir fondos que ayuden a reforzar sus ambiciosos planes de inversión en modelos eléctricos y nuevas características digitales innovadoras.
El plan está lidiando con algunas de las condiciones de mercado más desafiantes en años en una época en la que la economía está en desaceleración, la inflación está desenfrenada y el aumento de los costos de la energía han paralizado en gran medida las cotizaciones públicas.
Con información de Reuters y Bloomberg
