El cadáver del fundador y el mayor accionista de la cadena de café india Café Coffee Day (CCD), VG Siddhartha, fue encontrado el miércoles flotando en un río, dos días después de que su desaparición provocara especulaciones de que estaba bajo una fuerte tensión financiera.

El consejo de CCD tuvo una reunión de emergencia ayer después de la noticia y nombró al miembro independiente SV Ranganath como presidente interino. La compañía también estableció un comité que estará investido de los poderes del director ejecutivo.

Las acciones de la compañía caían 9.98% a 110.50 rupias indias a las 12:29 pm (hora de la Ciudad de México), después de perder más de 20% el martes, cuando se dio a conocer la desaparición de VG Siddhartha.

Reportes de prensa mencionaron una carta supuestamente escrita por el empresario donde dice que cedió a la presión de prestamistas y autoridades fiscales.

Autoridades policiacas dijeron que VG Siddhartha fue visto por última vez el lunes por la noche en un puente sobre el río Nethravathi, cerca de Mangaluru, una ciudad portuaria a unos 350 kilómetros del centro tecnológico de Bengaluru.

Siddhartha le pidió a su conductor que lo esperara en el puente mientras caminaba, dijo el oficial de policía Hanumantharaya. Al no regresar el ejecutivo, su conductor alertó a las autoridades.

Canales de televisión locales mostraron a rescatistas en botes recorriendo el río cerca del puente donde se vio por última vez a Siddhartha, quien proviene de una familia productora de café.

Algunos medios especularon que Siddhartha estaba bajo presión por deudas pendientes. En la supuesta carta culpaba a un socio de capital privado no identificado por presionarlo a una recompra de acciones, y también a autoridades fiscales por “acoso” y decisiones que perjudicaban la liquidez de la compañía.

“Luché durante mucho tiempo, pero hoy me di por vencido”, supuestamente escribió Siddhartha en la carta, que circulaba en redes sociales.

No se había podido verificar la autenticidad del documento y su contenido. Un miembro de la junta de la empresa dijo que no había recibido personalmente la carta y que no podía comentar sobre su autenticidad.

La firma estadounidense de administración de fondos de inversión KKR, que posee algo más del 6% de la compañía, dijo en un comunicado que estaba “profundamente entristecida  por los acontecimientos”.

Siddhartha posee una participación directa del 32.75% en CCD, que tiene unos 1,700 puntos de venta que elaboran capuchinos y lattes para la floreciente clase media de India y compite con la mayor cadena de café del mundo, Starbucks.

Junto a su familia y sus sociedades de cartera controla 53.93% de la empresa.

Al 30 de junio, Siddhartha, su familia y sus compañías holding habían comprometido alrededor del 75.7% de su participación en CCD para varios préstamos. El informe anual de 2018 de Coffee Day mostró que Siddhartha también había garantizado personalmente la mayoría de los préstamos.

También vendió recientemente alrededor del 20% de su participación en la empresa de tecnología Mindtree a la firma de ingeniería y construcción Larsen & Toubro.

Siddhartha estaba en conversaciones con Coca-Cola para vender CCD por hasta 1,450 millones de dólares, informó The Economic Times el mes pasado.

Nerviosismo por contenido

Inversionistas estaban nerviosos por las transacciones ocultas mencionadas en la carta. Además, la noticia de la desaparición llegaba en un momento en que el sector bancario de India lucha con el aumento de los préstamos incobrables.

“Mi equipo, los auditores y la alta gerencia desconocen totalmente todas mis transacciones. La ley debería responsabilizarme a mí y solo a mí ”, decía la supuesta carta. No proporcionó más detalles sobre las transacciones.

La deuda neta de Coffee Day se situó en 76,500 millones de rupias (unos 1,110 millones de dólares) en marzo, según datos de Refinitiv.

“Este podría ser otro problema para los prestamistas al convertirse en un incumplimiento”, dijo Shriram Subramanian, un experto en gobierno corporativo y fundador de la firma de asesores de poder InGovern.

La compañía trató de disipar las preocupaciones de inversores al afirmar que está “administrada profesionalmente y dirigida por un equipo de liderazgo competente, lo que garantizará la continuidad”.

Con de Reuters y el Financial Times