El rebranding de Twitter como X va más allá de un cambio de nombre o logo, implica la transformación de la red social en una superapp, plataformas particularmente populares en países asiáticos como China.

Dicho término se refiere a una aplicación de comercio y comunicación que integra una variedad de servicios para diferentes aspectos de la vida del usuario, entre ellos pagos, viajes o entretenimiento, de acuerdo con la firma de consultoría Accenture.

Para Elon Musk, la compra de la red social era una forma de acelerar la creación de X, una “app de todo”, según escribió en un tuit en octubre pasado.

El magnate ha manifestado previamente su admiración por la superapp WeChat, que nació como una aplicación de mensajería en China y hoy permite desde pedir un taxi y realizar pagos en comercios hasta iniciar trámites de divorcio.

La plataforma es uno de los casos más exitosos de este tipo de plataformas a nivel global, al ser la billetera digital más usada en China y la aplicación número uno en la nación, con más de 1,300 millones de usuarios mensuales activos, de acuerdo con Statista.

Popularidad regional

En el estudio “Los pagos ahora son personalizados”, Accenture señala que en la actualidad solo hay un puñado de verdaderas superapps y que en su mayoría se ubican en la región Asia-Pacífico.

Además de WeChat, hay casos como Paytm en India, que ofrece tanto servicios financieros como boletos de tren o reservaciones en el cine y acumula 300 millones de usuarios en el país, o Line, originaria de Japón con más de 84 millones de usuarios activos por mes.

Sin embargo, el informe nota que competidores en otros territorios, como PayPal, Revolut y el propio Twitter están haciendo esfuerzos encaminados a convertirse en superapps.

Dentro de Latinoamérica también hay casos de plataformas que también están tomando esta ruta, entre ellas la colombiana Rappi, la argentina Mercado Pago (de Mercado Libre) y la mexicana Baz, de Banco Azteca.

Rappi ha incrementado su oferta principal de delivery con productos como una tarjeta de crédito en alianza estratégica con Banorte, mientras Mercado Pago además de fungir como billetera digital ofrece pago de servicios y créditos.

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En el caso de Baz, que se promociona como “la primera superapp mexicana”, ofrece servicios como envíos de dinero, recargas de tiempo aire, compras en línea en Elektra, streaming de contenido audiovisual, entre otros.

Potencial de crecimiento

No sólo las empresas están interesadas en crear superapps, los consumidores también están dispuestos a adoptarlas.

De acuerdo con el estudio de Accenture, el 56% de los encuestados a nivel global desean la conveniencia de usar la misma app para todos sus pagos, mientras en México la cifra es de 44%.

Para 42% de los mexicanos, la facilidad de tramitar sería el principal atributo que los atraería a una súper aplicación, mientras para 29% sería el control o conveniencia.

Si bien replicar el caso de WeChat podría ser complejo a nivel local, sí podrían existir “superapps de nicho”, consideró Iván Uriza, director de consultoría en Accenture México.

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