El guacamole es uno de los productos más demandados en Estados Unidos durante la temporada del Super Bowl, sin embargo, este año se podrían frenar los récords de exportación que el aguacate marca cada febrero ante el desabasto de combustibles en México que pone en riesgo el traslado de este fruto hacia la frontera norte del país.

Cada año, productores mexicanos envían a EU cientos de miles de toneladas del también llamado “oro verde” para ser consumido por los fanáticos del fútbol americano durante la primera semana de febrero, en una mezcla que combina cebolla, cilantro, chiles rociados con jugo de limón y un toque de sal. Al menos para este año, los exportadores mexicanos proyectan vender 120,000 toneladas, 20,000 más que el año pasado.

El portavoz de la Asociación de Productores y Empacadores Exportadores de Aguacate de México (APEAM),  Ramón Paz declaró que la escasez de gasolina aún no ha afectado las operaciones hacia Estados Unidos, pero sí ha empezado a hacerlo en las labores locales de transporte del aguacate y de trabajadores para la recolección.

La cantidad de aguacates exportada aumenta hasta 10% en cada Super Bowl. Tan solo en enero de 2018, 100,000 toneladas fueron enviadas al país del norte de acuerdo con la APEAM, mientras que en 2017 fueron 90,000 toneladas.

De hecho, Michoacán, el estado con mayor producción de aguacate en el país ya inició el envío de cargamentos con esta materia prima para atender la alta demanda que generará Estados Unidos el próximo mes.

Sin embargo, las expectativas de ventas de varios agroempresarios todavía pueden ser recortadas ante la falta de gasolina y diesel que golpea desde hace días a estados del centro y occidente de México, tras una campaña del gobierno para atacar el extendido robo de combustible a la petrolera estatal Pemex.

“Nuestras tres semanas más importantes del año son ésta y las dos siguientes. Es cuando más cargamos para surtir toda la semana del Super Bowl”, expresó Paz.

El vocero fue consultado sobre cuánto podrían aguardar para realizar envíos, a lo que respondió “De aquí al 24 o 25 de enero es que tenemos que sacar todo ese volumen. Si no lo cargamos, ya no lo cargamos”.

Hasta ahora se han enviado a Estados Unidos 27,000 toneladas, de acuerdo con la APEAM, para el consumo en la semana del Super Bowl, que se realizará el 3 de febrero.