Semiconductores: una industria en la que México podría competir con Asia

Semiconductores: una industria en la que México podría competir con Asia

Son las pymes quienes permiten que exista un ecosistema robusto de proveedores que pueda abastecer a la industria, desde componentes pequeños hasta insumos especializados. 

Durante la presentación del Índice de Competitividad Estatal del IMCO, se abordó el papel de México frente a países asiáticos en el ámbito de la manufactura, con especial énfasis en la industria de semiconductores. Valeria Moy, directora del Instituto, señaló que existen opiniones divididas al respecto: por un lado, hay quienes consideran que resulta imposible competir con economías como China o Vietnam en términos de fabricación; por otro, algunos expertos sostienen que sí es viable.

A este respecto, Santiago Cardona, director de Compute de Qualcomm para Latinoamérica, señaló que México tiene el potencial de convertirse en un actor importante dentro de esta industria. No obstante, reconoció que para que un país logre integrarse exitosamente a la cadena de valor, existen tres factores clave: incentivos fiscales, disponibilidad de recursos naturales como energía y agua, y talento especializado. 

En este contexto, México forma parte de un grupo reducido de naciones con una posibilidad real de integrarse a la cadena global de semiconductores, junto con Vietnam, India y Malasia, pero aún queda mucho trabajo por hacer.

Durante la conferencia se destacó que nuestro país cuenta con talento de alta calidad en áreas STEM. “En Tijuana, nosotros estamos haciendo diseño de los procesadores más avanzados del mundo (…) entonces, el talento mexicano es buenísimo”, refirió el ejecutivo.

No obstante, el desafío es atraer a más estudiantes hacia estas áreas, pues la mayoría siguen optando por carreras tradicionales como derecho y administración. Ante esto, las universidades y los estados tienen un papel fundamental para incentivar y reclutar a más jóvenes en áreas estratégicas para el desarrollo de la industria.

El papel de las Pymes en la industria de semiconductores

Para Santiago Cardona, son las pymes “quienes complementan toda esa cadena de suministro”. Destacó que es fundamental que exista un ecosistema robusto de proveedores que pueda abastecer a la industria, desde componentes pequeños hasta insumos especializados. 

Esta integración no solo depende del mercado sino también de políticas públicas que faciliten la colaboración y desarrollo de las empresas locales. El ejecutivo señaló que “hay estados que dan muchísimos más incentivos fiscales que otros”, por lo que las condiciones ofrecidas a las empresas varían según el contexto.

Por su parte, Valeria Moy enfatizó que “el motor del desarrollo económico son las pymes y menos del 10% exporta. A este respecto, señala que las pymes enfrentan un desafío crucial: muchas de ellas no logran trascender su etapa inicial y permanecen pequeñas. Un número considerable de estas empresas desaparecen antes de consolidarse como actores relevantes dentro de las cadenas de producción.

En este sentido, Cardona resaltó la importancia de reducir la carga burocrática para facilitar la operación de las empresas. “El Plan Maestro de Semiconductores busca precisamente reducir la cantidad de trámites”. Esto beneficiaría no solo a las grandes compañías como Qualcomm, sino también a las pequeñas y medianas empresas (pymes) que integran la cadena de suministro.

¿Qué dice el Plan México sobre la industria de los semiconductores?

El Plan México, propuesto por el gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum, tiene como objetivo incrementar en un 15% el contenido nacional en las cadenas globales de valor, especialmente en sectores estratégicos como el de los semiconductores

La estrategia incluye una estrecha colaboración con Estados Unidos y el fortalecimiento del capital humano a través de universidades técnicas y centros tecnológicos, que ofrecerán programas especializados en áreas como mecatrónica, robótica, telecomunicaciones, sistemas e ingeniería industrial.

El documento pone énfasis en regiones clave como la Frontera Norte, el Pacífico y Sonora. Además, establece metas ambiciosas como duplicar la proveeduría local en la fabricación de diversos equipos electrónicos y duplicar el valor de las exportaciones.

También busca reducir en 10% la dependencia de componentes importados mediante el desarrollo de proveedores locales de sensores, actuadores, controladores inteligentes y sistemas para vehículos eléctricos, incluyendo baterías. 

Otras metas incluyen relocalizar 10,000 millones de dólares en operaciones ATP (assembly, testing and packaging), así como la instalación de una planta de semiconductores para inteligencia artificial en Jalisco.

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