El sexenio de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) se ha caracterizado por una caída constante en la producción conjunta de crudo en Petróleos Mexicanos (Pemex). Al comparar el año 2023 con el inicio de la administración federal en 2018, se revela una disminución del 12.4% en los barriles diarios de crudo, excluyendo líquidos y condensados, en las asignaciones actividades con socios.
Según las Estadísticas Petroleras de la empresa del Estado, en el inicio de la administración Pemex generaba 1.8 millones de barriles diarios, mientras que para el cierre del 2023, esta cifra se redujo a 1.5 millones de barriles, evidenciando una disminución significativa.
La tendencia a la baja ha sido una constante a lo largo del gobierno de López Obrador. Por ejemplo, en 2019 se registró una caída anual de 7.4%, la mayor del sexenio.
Para el año 2020 también se registró una caída anual en la producción, con 1.1%, y en el 2021 se generó un incremento de 1.6%. Para el 2022 la caída fue de 0.1% y para el 2023 se registró una disminución de 5.8%.
Para el analista energético Ramses Pech, los indicadores publicados de este viernes son una muestra de las implicaciones a largo plazo de las políticas y estrategias implementadas durante este sexenio, donde se plantean interrogantes sobre la sostenibilidad y el futuro de la producción petrolera en México.
En específico, ahondó, se cierra el sexenio con los siguientes comportamientos: una disminución constante en la producción de crudo, aumento de la dependencia a las importaciones y la creciente deuda de proveedores.
Hay que tomar en cuenta que a pesar de la expectativa en torno a la refinería Dos Bocas, el tipo de crudo pesado y las limitaciones de capacidad plantean interrogantes sobre la contribución real a la autosuficiencia
añadió el analista.
Producción de condensados de Pemex
No obstante, el sexenio de López Obrador presenta una dualidad en el desempeño de Pemex, siendo notable la recuperación en la extracción de hidrocarburos líquidos, especialmente en lo que respecta a los condensados.
Según la información proporcionada por la Secretaría de Energía, los condensados son compuestos líquidos derivados principalmente del gas natural, compuestos en su mayoría por pentanos y otros hidrocarburos más densos.
Después de una disminución del 7.6% en el 2019, se observa una tendencia positiva en la producción a partir del 2020, con incrementos del 0.1%, 3%, 1.6%, y 5.2% para los años 2020, 2021, 2022 y 2023, respectivamente.
Este repunte en la producción de condensados refleja un cambio significativo en la dinámica de la industria, destacando el papel clave de Pemex en la recuperación de este componente vital de la industria de hidrocarburos.
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