La administración de López Obrador ha hecho público su desdén por la figura de los farmouts, una asociación con privados mediante la cual el gobierno de Enrique Peña Nieto planeaba aumentar la producción de crudo de Pemex. Diversos reportes afirman que el actual Gobierno favorece el modelo de Contrato de Servicios Integrales de Exploración y Extracción (CSIEE), sin embargo, estos podrían resultar menos redituables para la compañía y menos atractivos para los inversionistas.

Las metas que se han planteado (2.4 millones de barriles diarios) son muy agresivas con o sin farmouts, y requieren una cantidad muy importante de recursos(…) Con la ayuda de los farmouts aumenta de manera importante la capacidad de alcanzar estas metas, pero no hay claridad al respecto y las señales que han dado (sobre certidumbre a inversionistas) tampoco han ayudado

Rodrigo Favela, Socio, HCX

En el esquema de farmouts ambos socios reciben un 50% de la producción obtenida, mientras que en CSIEE se establece una cuota por servicio. Rodrigo Favela, ex gerente de Planeación Estratégica de Pemex, reveló que existen estudios que apuntan a que los costos se elevan y la eficiencia baja cuando se utilizan contratos de servicios.

Uno de los argumentos de la actual administración para rescindir los contratos de farmouts es que estos no han conseguido la producción que se esperaba, pero Miriam Grunstein, Investigadora asociada al Centro México de Rice University, señaló que esto no se debe al propio modelo de la reforma, sino que se trata de un proceso que puede tardar entre 4 y 8 años para impactar la producción de manera real.

(Además), no hay razón para pensar que la combinación monopolio más empresas de servicio puede ayudar a levantar la producción

Miriam Grunstein, Investigadora asociada al Centro México de Rice University

Arturo Carranza, especialista en energía del Instituto Nacional de Administración Pública, advirtió que los contratos de servicios son menos flexibles y dejan el plan de trabajo, y por lo tanto la mayoría de los riesgos, en manos de Pemex. “En el fondo (el objetivo) es poner en el centro del diseño energético y petrolero a Pemex, es decir: fortalecerlo permitiendo que sea quien diga cómo y dónde perforar”. Esta recuperación de posición ocurriría a costa de reducir la participación de los inversionistas en la toma de decisiones y, por lo tanto, reducir aún más la certidumbre.

El cambio de política podría además afectar el crecimiento de producción de Pemex debido a la falta de capacidad financiera y operativa de la empresa. El petróleo está ahí, la capacidad de Pemex no, y se requerirá de más recursos para alcanzar sus metas.

Hoy en día Pemex tiene una inversión de más o menos 10,000 millones de dólares al año. De acuerdo con la CNH, para que alcance la meta de 2.4 millones de barriles se necesitarían inversiones del orden de los 34,000 millones de dólares (incluyendo pago de deuda)

Arturo Carranza, especialista en energía, Instituto Nacional de Administración Pública

La exploración de aguas profundas y yacimientos no convencionales también es una herramienta importante que podría ayudar a elevar la producción de petróleo. A pesar de que la actual administración se había negado a estos proyectos, el subdirector técnico de Exploración y Producción de Pemex, Francisco Javier Flamenco, reveló en el pasado Congreso Mexicano del Petróleo que sí se prevé el uso de esta tecnología durante los dos últimos años del sexenio,

A pesar de sus aparentes beneficios, los farmouts podrían no ser la solución para la exploración de aguas profundas.

En aguas profundas es muy riesgoso y se requiere mucha inversión(…) Pemex no tiene la experiencia ni los recursos para hacerlo solo(…) se puede asociar con otras empresas y que todos tengan derecho a los recursos en proporción a su participación para tomar la reserva como parte de la garantía. La diferencia (con la figura de farmouts) es sutil y en cuestiones de dinero es muy parecido

Rodrigo Favela, Socio, HCX

Esto significa que, sin importar el tipo de asociación a elegir, sería necesario que la cooperación comience durante la exploración y continúe durante la producción como un modelo de producción compartida o utilidad compartida. Es decir, si Pemex quiere elevar su producción a números cercanos a los 2.4 millones de barriles, tendrá que hacer uso de esquemas muy similares a los farmouts.

El plan de Negocios de Pemex se presentará esta semana, según el subsecretario de Hacienda, Arturo Herrera, y los expertos coincidieron en que no esperan grandes cambios respecto a lo que la compañía ha mostrado hasta ahora, por lo que los farmouts podrían estar de salida. Sin embargo, recientemente se ha reportado una preocupación de Hacienda por la reacción que las calificadoras podrían tener si se elimina este modelo, lo que deja una pequeña esperanza de que sean incluidos en el nuevo plan.