Pemex ha disminuido sus metas de producción de crudo para finales del sexenio, pero la falta de inversión en exploración significa que la empresa tendrá mayores dificultades para financiarse a pesar del apoyo del gobierno Federal. Esto, a su vez, tiene implicaciones importantes para el presupuesto federal de los años por venir.

“El tema no es Pemex, sino qué va a pasar con México. Cuando oyes al secretario de Hacienda decir que es un buen negocio para el país y luego escuchas al analista de Pemex decir que la empresa le cuesta al país el 0.5% del PIB y que si le va muy bien pudiera aportar el 0.1%, entonces algo no checa”, explicó Rosanety Barrios, analista del sector.

La experta destacó que esto representa un gasto para el erario público y para los mexicanos, situación que no se sabe cuánto tiempo será sostenible para el país. Además, recordó que los propios analistas de Moody’s han dicho que la empresa requerirá de más inversión porque su estrategia actual es equivocada.

“¿Cuánto tiempo más (se puede sostener esta estrategia? Pues no sé. Necesitarías, desde mi punto de vista, una reforma fiscal importante que te permita elevar la captación y de esa manera seguir tapando este hoyo negro de gastos. Yo preguntaría si eso es correcto y tiene sentido para México. Yo pienso que no”, lamentó Barrios.

Barrios dijo que la calificación de Pemex y de la deuda soberana dejan claro que se tiene que hacer algo para corregir el camino, pues se trata de un “negocio perdedor”. “El problema no es para Pemex, es para los mexicanos y es importante reiterar ese punto y preguntar cuánto tiempo más, porque con los mensajes que se dan en la mañana se transmite la idea de que Pemex está saliendo de un problema, pero no es así”, destacó.

Una fuente que prefirió no ser identificada señaló la importancia de la restitución de reservas para el futuro de la empresa, y recordó que el ideal de una petrolera es tener un balance entre la exploración y la producción para mantener una cantidad respetable de reservas probadas.

“No quieres llegar al caso de Colombia, que cada vez se les acerca más el fin de las reservas probadas. Es un balance que en realidad es necesario, pero también habla de que la baja en la producción alarga la vida de las reservas probadas, y el hecho de que una disminución en la producción esté en discusión está atado al estado de las reservas probadas”, dijo.

La fuente recordó que los especialistas han comentado la mala estrategia de exploración de Pemex desde principios del sexenio, pues “no toda la exploración es igual”, y la empresa está dejando ir oportunidades importantes de explorar en zonas a las que no se les ha puesto atención hasta ahora.

“Ante un cambio de costo por barril de petróleo (las reservas actuales) tienen un perfil elevado de producción y se vuelven cada vez más difíciles de extraer. Se trata de un componente que no se está considerando en la estrategia de exploración actual”, advirtió.