Los Baillères no crearon El Palacio de Hierro: esta es la verdadera historia de sus fundadores

Los Baillères no crearon El Palacio de Hierro: esta es la verdadera historia de sus fundadores

Palacio de Hierro mantiene un modelo enfocado en exclusividad, una filosofía que se ve reflejada en su número limitado de tiendas.

La cadena mexicana de tiendas departamentales de lujo, Palacio de Hierro, cuenta con casi 140 años de historia y su caso de éxito está ampliamente ligado a sus actuales dueños, la familia Baillères; sin embargo, ellos no estuvieron presentes en la compañía desde su fundación.

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La historia de la empresa se remonta a los tiempos cuando México vivía el auge del Porfiriato. La tienda es tan antigua que su fundación antecede por más de 20 años al estallido de la Revolución Mexicana.

Los verdaderos fundadores del Palacio de Hierro y su apuesta arquitectónica

El nacimiento del Palacio de Hierro está ligado a Joseph Tron y Joseph Léautaud, dos jóvenes provenientes del valle de Ubaye, un pueblo ubicado en los Alpes al sur de Francia, quienes eran conocidos como los barcelonnettes.

La llegada a México de los franceses alrededor de 1864 marcó el inicio de una trayectoria que transformaría para siempre la experiencia de compra en el país.

Ambos hermanos comenzaron como empleados en el pequeño comercio, “Las Fábricas de Francia”, frente al Zócalo capitalino de la Ciudad de México. Con disciplina y visión empresarial, adquirieron el negocio y formaron la sociedad J. Tron y Cía., que pronto destacó por su innovación.


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En 1888 decidieron dar un salto audaz y construyeron un edificio con estructura de hierro y acero, un hito arquitectónico inusual en México para esos años. La construcción llamó tanto la atención que la gente comenzó a llamarlo “El Palacio de Hierro”, nombre que posteriormente adoptó la tienda de manera oficial.

El proyecto no solamente introdujo un concepto moderno de tienda departamental en el país, sino también se convirtió en la primera sociedad anónima del comercio mexicano, sentando las bases del consumo moderno.

Palacio de Hierro

La era Baillères: expansión y la consolidación del lujo

La historia de expansión de la marca comenzó aproximadamente 80 años después de su fundación. En 1963, el Palacio de Hierro fue adquirido por el empresario mexicano Raúl Baillères, integrándose a lo que hoy se conoce como Grupo Bal, uno de los conglomerados empresariales más relevantes del país.

Desde ese momento comenzó una etapa de expansión estratégica, continuada por su hijo Alberto Baillères, quien se quedó en la dirección de la tienda departamental.

  • 1980: apertura de una tienda en Perisur
  • 1989: sucursal en Centro Comercial Coyoacán
  • Década de 1990: nuevas tiendas en Santa Fe, Polanco (Plaza Molière) y Satélite

El peso económico del conglomerado Grupo Bal, con empresas en el sector minero, financiero y de seguros, comercio, agroindustria y educación, también ha sido clave en este proceso.

Esta solidez financiera le ha permitido desarrollar un amplio ecosistema de moda, diseño y estilo de vida que incluye tiendas departamentales, boutiques especializadas y conceptos como “Casa Palacio”.

Un portafolio selectivo de El Palacio de Hierro

A diferencia de otras marcas y empresas, el Palacio de Hierro mantiene un modelo enfocado en exclusividad, una filosofía que se ve reflejada en su número limitado de tiendas.

Actualmente opera 22 tiendas en México, distribuidas en distintos formatos:

  • Tiendas departamentales grandes (15)
    Centro, Coyoacán, Durango, Guadalajara, Interlomas, León, Monterrey, Perisur, Polanco, Puebla, Querétaro, Santa Fe, Satélite, Veracruz, Villahermosa
  • La Boutique Palacio (3)
    Cancún, Acoxpa, Acapulco
  • Casa Palacio (2)
    Antara, Santa Fe
  • Palacio Outlet (2)
    Lerma, Punta Norte

Así, la trayectoria de la cadena de tiendas departamentales de lujo ha sido marcada por dos pasos fundamentales: la incursión de los hermanos franceses, Joseph Tron y Joseph Léautaud, y la expansión con la familia Baillères.

A día de hoy la marca combina tradición, arquitectura emblemática, servicios personalizados y un enfoque omnicanal que le han permitido mantenerse competitiva pese a nuevos jugadores innovadores en el mundo del retail.

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