Los accionistas estadounidenses de Liverpool temen que la cadena departamental corra la misma suerte que otros grandes almacenes como Sears, JC Penny o Macy’s, los cuales atraviesan por una difícil situación.

La desconfianza de los inversionistas se refleja en el precio de las acciones de la mexicana, que se encuentra en mínimos desde 2011, al cotizar en los 102.8 pesos por papel. Tan sólo en un año, se ha depreciado casi 27%.

Sin embargo, sus resultados financieros son alentadores, con un crecimiento en ingresos de 9.2% en el segundo trimestre del año, comparado con el mismo lapso de 2018, un aumento en su flujo operativo (EBITDA por sus siglas en inglés) de 11.4% y una ganancia en su utilidad neta de 12.4%.

A pesar de que los resultados de la emisora han sido buenos, los inversionistas extranjeros, en su mayoría estadounidenses, temen que se replique lo que sucedió en Estados Unidos con otras cadenas como Sears o JC Penny

dijo José Antonio Cebeira, analista en Actinver.

Por su parte, Verónica Uribe, analista de Monex Casa de Bolsa, comentó que el temor es infundado porque el mercado de tiendas departamentales en México está muy lejos de alcanzar el nivel de madurez que el estadounidense.

“El consumo es muy distinto, el comercio electrónico tiene un peso más fuerte en las ventas totales de las tiendas, en México en el mejor de los casos llega al 3%. Además, los mexicanos aún ven como opción ir a un centro comercial a comprar, lo que ya casi no sucede en Estados Unidos”, dijo Uribe.

Prueba de ello es que la empresa continúa abriendo nuevas unidades. Al cierre de junio de este año, la empresa contó con 166 tiendas bajo el nombre Liverpool, Fábricas de Francia y Suburbia, lo que representó 11 nuevas que al mismo periodo del 2018.

Sears, el gigante que cayó

Sears se declaró en bancarrota en octubre pasado y se acogió al capítulo 11 de la Ley de Quiebra de Estados Unidos, que le permite reorganizar el pago de sus deudas sin dejar de operar su negocio.

En febrero de 2019 un juez aprobó la venta de la mayoría de los activos de la empresa por 5,200 mdd, lo que salvó a la compañía de la quiebra.

Bloomberg aún registra los resultados de la compañía y para el segundo trimestre de 2019 tuvo un difícil periodo.

Sus ingresos retrocedieron 27%, su EBITDA marcó números rojos y cerró en 2 millones de dólares (mdd), en tanto obtuvo una pérdida neta de 402.1 mdd.

Las acciones se mantienen sin movimientos en el último año, con un precio de 0.24 dólares por papel.

De diciembre de 2017 a agosto de 2018, Sears cerró 64 tiendas en territorio estadounidense y finalizó con 506 unidades, según su último reporte financiero emitido por la empresa.

JC Penny sigue los pasos de Sears

La cadena muestra signos de debilidad, debido a la caída de sus ventas y de acuerdo a una nota publicada por Reuters, por una elevada deuda a largo plazo que arrastra.

Sus estados financieros revelan que, en el último trimestre, los ingresos registraron una caída de 7.8% comparado con el periodo de abril a junio de 2018. En tanto, su EBITDA se contrajo 47% y tuvo una pérdida neta de 90.7 mdd.

El precio de las acciones cotiza en 0.74 dólares por título, su mínimo histórico.

Como estrategia, JC Penny opta por la reducción en el número de tiendas que maneja y cierra aquellas que no le sean rentables. En el último año ha descontado 10 unidades y suma cerca de 850 en Estados Unidos.

Macy’s, estable… por ahora

Otra firma emblema del retail estadounidense ha conseguido librar el ‘bache’ por el que atraviesa, con un aumento moderado en sus estados financieros.

En el segundo trimestre del año, Macy’s reportó una caída de 0.8% en sus ingresos con respecto al mismo lapso de 2018 y una variación de 5% en su EBITDA. Asimismo reportó una utilidad neta de 185.0 mdd.

El precio de sus acciones cotiza a 14.76 dólares por papel, monto no visto desde 2009, cuando alcanzó los 11.76 dólares por acción.

En un año, la minorista ha cerrado cerca de 10 tiendas, para contabilizar al mes de agosto de este año 680 unidades bajo el nombre de Macy’s y Bloomingdale’s.