Durante el primer trimestre del año, la utilidad operativa y el flujo operativo (EBITDA) de Grupo Carso registraron una contracción respecto al periodo comprendido entre enero y marzo del año pasado, mientras que la utilidad neta se elevó 23.3% durante el periodo.
De acuerdo con el reporte enviado a la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), el EBITDA de Grupo Carso totalizó 3,015 millones de pesos, una cifra 8.6% inferior al monto reportado en el primer trimestre de 2019, con un margen EBITDA de 12.6%.
En tanto, la utilidad de operación del Grupo disminuyó 15.0% al alcanzar los 2,198 millones de pesos con una menor rentabilidad en todas las divisiones, principalmente Grupo Sanborns quien reportó una reducción de 28.8%, aunado a ingresos extraordinarios en Infraestructura y dividendos de Asociadas registrados en 2019.
En cuanto a la utilidad neta controladora, el grupo controlado por la familia Slim reportó 2,114 millones de pesos, lo que supone un aumento de 23.3% en comparación con los 1,715 millones del 1T19.
El incremento, de acuerdo con la compañía, obedeció principalmente a efectos cambiarios en el Resultado Integral de Financiamiento (RIF).
En ese sentido, Carso refirió que la apreciación del tipo de cambio promedio de 7.5% en el periodo explica que el RIF fuera positivo por 1,888 millones de pesos. en comparación con un gasto financiero por 354 millones de pesos registrado en el primer trimestre de 2019.
Respecto a las ventas, Grupo Carso reportó un aumento de 5.2%, a 24,017 millones de pesos, en el primer trimestre de este año. Carso Infraestructura y Construcción y Grupo Condumex aumentaron sus ventas 26.2% y 4.3%, respectivamente.
Sin embargo, Grupo Sanborns disminuyó 1.4% sus ventas por el impacto en las dos últimas semanas de marzo de las medidas de prevención y mitigación ante la emergencia sanitaria por COVID-19, que redujeron el tráfico en las tiendas.
La deuda total al 31 de marzo de 2020 fue de 28,751 millones, más del doble en comparación con la deuda al cierre de diciembre de 2019, la cual fue de 12,600 millones.
Lo anterior debido a la deuda por 400 millones de dólares de Ideal Panamá, adquirida en febrero de 2020, la colocación del Certificado Bursátil por 3,500 millones de pesos en marzo y el efecto cambiario en la deuda del Gasoducto Samalayuca-Sásabe.
La deuda neta fue de 18,441 millones de pesos, mientras que el importe de efectivo y equivalentes del 1T20 totalizó 10,309 millones de pesos, ligeramente superior al reporte al cierre de 2019.
