La decisión de la administración del presidente López Obrador de detener las rondas petroleras provoca que México produzca menos gas natural y que, por lo tanto, sea menos capaz de satisfacer la demanda interna, además de que ha representado un golpe a las finanzas nacionales, a pesar de la postura del Ejecutivo.

“Pemex no pierde sin las rondas petroleras, quien pierde es México, porque Pemex está siendo sostenido por el gobierno a pesar de sus resultados”, explicó Rosanety Barrios, analista del sector.

Hay campos que hoy están bajo la custodia de la CNH y que hoy no están asignados a nadie, de manera particular los de gas. Pemex nunca ha invertido en gas y no tiene posibilidades de hacerlo.

Destacó que muchas de las reservas de gas natural en México se encuentran en campos no convencionales, y Pemex no tiene las condiciones económicas y técnicas para ponerlos a producir.

“Históricamente, la razón principal por la que Pemex no desarrolla el gas es porque durante mucho tiempo fue menos rentable que el petróleo. La empresa priorizó el desarrollo del petróleo y todo el gas asociado se venteaba, entonces nunca se crearon las capacidades”, señaló David Maravilla, lead analyst de Horizon Client Access.

La transformación acelerada del sector energético a nivel mundial quiere decir que, mientras más tiempo pase, es menos probable que estos campos sean explorados.

“Si el 40% del consumo de petróleo está impulsado por transporte sobre ruedas, y tú sabes que ahí viene el motor eléctrico, el crecimiento del petróleo en el mundo no se ve claro. No quiere decir que vaya a desaparecer el consumo, pero el crecimiento esperado es otro”, dijo Barrios.

En este panorama, México tendría que aprovechar al máximo los hidrocarburos que están en el subsuelo, sin importar que Pemex tenga sus propios problemas y no sea capaz de atender todas las reservas mexicanas. Esa posibilidad es una de las grandes pérdidas de haber detenido las rondas petroleras.

A principios de este año, Pemex presentó a CNH proyecciones de producción de ciertos campos que ya incluyen desarrollo de gas no convencional.

La Comisión aprobó estos planes, a pesar de que algunos comisionados señalaron que la empresa probablemente no sea capaz de desarrollarlos efectivamente. Parte de por qué Pemex no tiene el conocimiento técnico necesario es porque el ejecutivo ha desperdiciado la oportunidad de que la empresa aprenda mediante asociaciones con otras compañías.

“Un tema que no se habla tanto es que el país gana mucho de tener a Pemex trabajando en asociaciones privadas con empresas petroleras, porque hay formas de hacer las cosas, técnicas, tecnología y estrategias que no se pueden adquirir en el mercado internacional. La gente de Pemex tiene que verlo y experimentarlo, y los farmouts son una gran oportunidad para hacer eso”, destacó Maravilla.

La falta de rondas, entonces, dejan a Pemex como el único jugador en el país, a pesar de que no tiene la habilidad de satisfacer las necesidades nacionales. Esto no necesariamente es beneficioso para Pemex, y resulta perjudicial para el país.

“Los hidrocarburos en el subsuelo son de la nación, no de Pemex. La reforma lo que hizo fue reconocer eso y señalar que a la nación le toca decidir cómo se van a explotar esos hidrocarburos. Todo mundo le compró a este gobierno el disparate de que lo que importa es Pemex, cuando lo que importa es México”, resaltó Barrios.