Las conversaciones de última hora para detener un boicot a Facebook por la falta de regulación de los discursos de odio en el sitio fracasaron.

Por ello, los anuncios de más de 400 marcas, incluidas Coca-Cola y Starbucks, desaparecerán de Facebook a partir de hoy.

Grupos de derechos civiles de Estados Unidos acudieron a las multinacionales para presionar al gigante de las redes sociales a tomar medidas concretas en contra del discurso de odio, luego de la muerte de George Floyd y en medio de una reflexión nacional sobre el racismo.

Ejecutivos de Facebook, entre ellos Carolyn Everson, vicepresidenta de soluciones de negocios globales, y Neil Potts, director de políticas públicas, mantuvieron al menos dos reuniones con anunciantes el martes, el día anterior al boicot planeado de un mes, dijeron a Reuters tres fuentes que participaron en las llamadas.

Sin embargo, los ejecutivos no dieron nuevos detalles sobre cómo abordarían el discurso de odio, dijeron las fuentes. En cambio, sólo se refirieron a comunicados de prensa recientes; los anunciantes que participaron de las conversaciones consideraron que esos planes no van lo suficientemente lejos.

“Simplemente no se mueve”, dijo un ejecutivo de una importante agencia de publicidad sobre las llamadas.

El presidente ejecutivo de Facebook, Mark Zuckerberg, acordó reunirse con los organizadores del boicot, dijo una portavoz a última hora del martes.

Grupos de derechos civiles de Estados Unidos, como la Liga Anti-Difamación, NAACP y Color of Change, comenzaron la campaña “Stop Hate for Profit” después de la muerte de Floyd, quien murió asfixiado bajo la rodilla de un oficial de policía blanco el 25 de mayo.

Los grupos hicieron 10 demandas para Facebook, que incluyen permitir que las personas que sufren acoso severo hablen con un empleado de la red social y un reembolso a las marcas cuyos anuncios aparezcan junto a contenido ofensivo que luego se elimina.

Facebook dijo a principios de esta semana que se sometería a una auditoría de sus controles a los discursos de odio, además de sus planes para etiquetar contenido de interés periodístico que de otra manera violaría sus políticas, basados en prácticas similares de otras plataformas de redes sociales como Twitter Inc.

El representante de una agencia de publicidad digital que participó en una llamada el martes dijo que los ejecutivos de Facebook se refirieron repetidamente a la auditoría, sin ofrecer concesiones adicionales.