La octava edición del Buen Fin en México alcanzó ventas de 104,800 millones de pesos, según cifras preliminares de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco Servytur), lo que significaría un incremento del 8% respecto al año anterior.
En línea con el cambio de hábitos en el consumo en el país, se estima que las ventas por internet aumenten 50% con respecto al año anterior, detalló el presidente de la Confederación, José Manuel López Campos.
“El Buen Fin generó efectos benéficos para la economía nacional, al permitir el incremento de las ventas en las empresas (…), una mayor bancarización y una contribución importante en la formalización de la economía y, en consecuencia, en el pago de impuestos”, dijo López Campos en un comunicado.
En esta edición del Buen Fin participaron 100,000 establecimientos pertenecientes a 70,000 empresas.
Una de las principales tendencias que impulsa a El Buen Fin es la planificación de los involucrados, explicó la analista en Euromonitor International Marisol Rauda.
“Los consumidores ya planifican con meses de anticipación lo que desean comprar para aprovechar las ofertas, ya sea ahorrando, comparando precios o buscando préstamos o créditos. Por otro lado, los emisores de tarjetas ya sean empresas, bancos o entidades de crédito, aprovechan para ofrecer tarjetas a nuevos titulares o aumentar el límite de crédito para los clientes actuales”, detalló.
Entre los retos a superar, según la especialista, es la idea de que los precios son modificados antes del Buen Fin para poder aplicar descuentos atractivos.
Un ejercicio de EL CEO reveló que esta situación ocurrió en diversas tiendas en la CDMX.