La industria automotriz reiteró este lunes su rechazo a la regulación de los autos chocolate, y demandó al presidente Andrés Manuel López Obrador que se pronunciara “con claridad y contundencia” en su contra.

“La demanda concreta de la AMDA, compartida por todo el sector automotor, a nuestro presidente es que, dado el contexto de crisis en el que se encuentra la industria automotriz, y dadas las expectativas altas de factores adversos que pudieran hacer más difícil el desempeño de la economía en 2020, es necesario que -de manera clara y contundente- el presidente se pronuncie y manifieste que en su gobierno no habrá lugar para que se regularicen vehículos de contrabando”, expresó Guillermo Rosales Zárate, titular de la AMDA en conferencia de prensa.

Los dirigentes de la Asociación Mexicana de Distribuidores Automotores (AMDA) y de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), también urgieron al secretario de Hacienda y Crédito Público a intervenir en la importación ilegal de estos automóviles provenientes, en su mayoría, de Estados Unidos.

Nunca ha dicho (López Obrador)  que regularizará estos autos, pero tampoco que no lo hará. 

De acuerdo con la IP, la ambigua respuesta de las autoridades federales genera expectativas de quien introduce vehículos chocolates a México y de quienes lo compran, además de incertidumbre en el sector privado.

Asimismo, acusaron el uso de la figura y el nombre del representante del Ejecutivo por parte de legisladores que presentan iniciativas en el Congreso para regularizar los automóviles de contrabando.

“Con sólo acercarse y entregar un documento que solicite al presidente la regulación de los autos chocolates es suficiente para que salgan a decir que el presidente lo aprueba. Es un abuso por parte de las organizaciones”, dijeron.

La industria sostiene que el contrabando es una forma de corrupción con la clase política local.

Expusieron que la estimación del sector para enero de 2020 se “quedó corta” 4.4 por ciento, pues de las 100,247 unidades que esperaban vender, la demanda real se limitó a 104,832.

La cifra representa, a su vez, una caída de 6% respecto al mismo periodo de 2019.

Protesta constante para los automotores

En octubre pasado, ambas organizaciones rechazaron el artículo transitorio décimo quinto, que aprobaron los diputados en laLey de Ingresos (LIF) 2020, que regulariza a los autos ilegales en México.

Desde entonces, arguyen que la medida legislativa que busca regular los autos chocolate provocaría una pérdida de 30% en la venta de automóviles nuevos en por los próximos 36 meses, es decir, que la cifra final de 1.3 millones de unidades vendidas en 2019 a se reduciría  900,000.

Hasta el último dato emitido por el Instituto Nacional de Estadísticas y Geografía (Inegi), con la caída de 6% registrada en enero se acumulan 32 meses de pérdidas.