El ultimátum a Aeromar por parte del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) y de Aeropuertos y Servicios Auxiliares demandando el pago de adeudos para poder seguir realizando vuelos y ser abastecida con combustible han puesto ‘en jaque’ a la aerolínea, cuya operación podría tener los días contados.

La advertencia se da en medio de un aparente interés por parte de un inversionista de origen brasileño por hacerse con la aerolínea mexicana y del emplazamiento a huelga pospuesto por parte de los trabajadores, que cada vez tienen menos margen de operación, con tres rutas y solo cuatro aeronaves disponibles.

Todo ello, aunado a las reuniones en la Junta de Conciliación y Arbitraje para conciliar con los trabajadores sobre las demandas que se tienen por incumplimiento de pago del contrato colectivo.

El próximo 15 de febrero es la fecha límite para que Aeromar zanje sus deudas con el aeropuerto capitalino, lo que pone en riesgo la operación pues ello significaría que a partir de la segunda mitad del mes la compañía no pueda seguir operando, lo que dejaría ‘en tierra’ a alrededor de 600 familias que trabajan directa e indirectamente, incluyendo a 80 pilotos.

Según los cálculos, el adeudo ronda los 500 millones de dólares, que de no pagarse, convertiría a Aeromar en la tercera aerolínea en morir en los últimos años, después de Interjet y de Mexicana de Aviación.

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Compra de Aeromar, una esperanza para trabajadores y acreedores

De acuerdo con el capitán José Alonso, secretario de prensa de la Asociación Sindical de Pilotos Aviadores de México (ASPA), a principios de febrero, además del ultimátum del AICM y de ASA, a Aeromar le llegó una notificación más: una carta compromiso la brasileña Nella Airlines, interesada en adquirir a la aerolínea

La propuesta, según lo que revela la empresa a los trabajadores, consiste en que el inversionista brasileño proponga un plan de pagos a plazos, por lo que confía en el que gobierno mexicano le dé foro para que éste pueda explicar su propuesta y a partir de ahí definir si es viable o no, aseguró el capitán Alonso. 

Lo que nosotros tratamos de promover es que escuchen la oferta, determinar si es viable y lograr alcanzar un acuerdo que flexibilice los pagos, porque el dueño de Aeromar no ha pagado, y tal vez sea conveniente recuperar el dinero a plazos a no recuperar nada 

puntualizó el secretario de prensa de ASPA

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A un paso del concurso mercantil

Pablo Casas Lías, director del Instituto Nacional de Investigaciones Jurídico Aeronáuticas (INIJA) señaló por su parte que, Aeromar “está técnicamente quebrada” pues no cuenta con capital para mantener su operación, incluyendo los servicios que requieren sus aviones, por lo que augura que la suspensión es inminente y se hará efectiva de manera inmediata.

El panorama es realmente complicado, por lo que podría entrar a concurso mercantil o quedar prácticamente en el abandono. Esta situación es la realidad de todas las aerolíneas que han vivido la quiebra, desafortunadamente los dueños las llevan a la quiebra de una manera fraudulenta

Al respecto agregó que maquinan el fraude a través de los concursos mercantiles, al dejar a los trabajadores sin indemnización, a los proveedores sin facturas, y a los pasajeros, sin la advertencia de que pueden perder su dinero y no volar. 

En ese sentido, Casas Lías explicó que el hecho de que sigan vendiendo boletos a los viajeros “es un desatino de la autoridad aérea como de Profeco” pues, en su opinión, deberían de emitir alertas a los viajeros sobre el riesgo de quedarse varados y sin el reembolso del boleto.

El especialista alertó que cada vez que una aerolínea mexicana se va a la quiebra, “los rumores falsos de que va a haber infinidad de empresarios, accionistas o fondos de inversión que van a entrar al rescate”, lo que no resulta siempre real.