Los precios del petróleo cerraron una nueva sesión con incrementos y lograron concretar su quinta semana con ganancias, luego de un aumento en el apetito de riesgo ante un menor temor de una recesión mundial y un recorte en la producción de crudo. 

El contrato de septiembre de WTI de Estados Unidos subió 0.72% a 80.67 dólares; mientras que el Brent del Mar del Norte para entrega en septiembre ganó 0.88%, a 84.98 dólares por barril, de acuerdo con datos de Bloomberg.

Para la semana, el WTI de Estados Unidos tuvo un incremento de 4.6%; por su parte, el Brent del Mar del Norte registró una ganancia semanal de 4.8%.

Leer más: Producción de petróleo en México crece 2% en el primer semestre tras dos años con caídas 

Apetito por el riesgo crece

El apetito por el riesgo en los mercados financieros más amplios se ha visto impulsado por las crecientes expectativas de que los bancos centrales, como la Reserva Federal (Fed, por su sigla en inglés) y el Banco Central Europeo (BCE), se acercan al final de las campañas de endurecimiento de las políticas, lo que impulsa las perspectivas de crecimiento mundial y la demanda de energía.

Además, el espíritu optimista se fortalece ​​​​por los recortes de suministro de la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus aliados (OPEP+) anunciados a principios de este mes; y por el dato del Producto Interno Bruto (PIB) del segundo trimestre de Estados Unidos, que creciera a un 2.4%, superando los pronósticos y respaldando la opinión del presidente de la Fed, Jerome Powell, de que la economía puede lograr el llamado “aterrizaje suave”.

Los inversionistas se están entusiasmando con la idea de que las tasas máximas están cerca, mientras que parece cada vez más probable que Estados Unidos evite la recesión, dijo el analista de PVM Tamas Varga.

Los nuevos datos publicados el viernes mostraron que algunas de las principales economías de la zona euro mostraron una resistencia inesperada en el segundo trimestre, incluso cuando una serie de indicadores apuntaban a una renovada debilidad en el futuro, ya que la fabricación se debilita y los servicios se ralentizan.

Mientras tanto, los formuladores de políticas en China se comprometieron a intensificar las medidas de estímulo para fortalecer la recuperación posterior al COVID-19 después de que la segunda economía más grande del mundo creciera a un ritmo frágil en el segundo trimestre.

Por el lado de la oferta, la evidencia de ajuste está aumentando, dada la disminución de los inventarios de Estados Unidos y el recorte voluntario de Arabia Saudita de 1 millón de barriles por día, dijeron analistas de Commerzbank, destacando que este mes podría haber visto la producción de petróleo de la OPEP caer a su nivel más bajo desde el otoño de 2021.

Para más información visita nuestro canal de YouTube

Con información de Reuters