El mercado bursátil mexicano atraviesa por un periodo de sequía de listados de empresas en los cuatro años de gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) que no se veía desde inicios del siglo.

Las dos bolsas de valores que hay en el país buscan la manera de atraer a más participantes al mercado, pero los esfuerzos se han topado con un clima de incertidumbre económica y política.

Lo que más preocupa a los centros bursátiles es la falta de Ofertas Públicas Iniciales (OPIs) de acciones. En lo que va de este gobierno, solo se ha realizado una emisión por parte Cox Energy en la Bolsa Institucional de Valores (BIVA) en 2020.

Se trata del número más bajo de colocaciones, al menos desde el sexenio de Vicente Fox, periodo en el que se listaron nueve emisoras, de acuerdo con datos de los reportes anuales de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV).

 

Durante los dos gobiernos anteriores, de Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto, se registraron un total de 45 OPIs, ante un momentum de gran apetito de las compañías nacionales por salir a bolsa que se apagó en 2017, año en el que se hizo la última emisión en la BMV.

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Bajo crecimiento frena colocaciones

Analistas consultados por EL CEO coinciden en que el desinterés de las empresas por listarse en bolsa responde a que el crecimiento económico del país se estancó, lo que ha provocado una pérdida de confianza.

Las empresas no están buscando recursos en bolsa porque la expectativa de crecimiento no es tan alta, no están viendo mayores posibilidades de expansión

dijo Carlos González, director de análisis y estrategia bursátil en Monex.

El impulso a los proyectos insignia del gobierno como el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), el Tren Maya o la refinería de Dos Bocas, una serie de reformas presentadas y los constantes choques con el empresariado también han abonado a la sequía del mercado.

Diferencia con sexenio de Fox

Amin Vera, director de inversiones en INVALA Family Office, enfatizó que en el sexenio de Fox se enfrentaba un escenario similar al actual, con la tasa de interés de Banco de México (Banxico) a doble dígito, inflación elevada y poco crecimiento, pero sectores como el de las vivienderas fueron impulsados para salir a bolsa.

Se viven condiciones macroeconómicas difíciles, pero la diferencia es que ahora no hay confianza y eso frena la parte de colocaciones en bolsa

dijo el analista.

El panorama cambió a partir de 2007 con la llegada de Felipe Calderón a la presidencia, pero tuvo su mejor momento de 2013 a 2017 en el sexenio de Enrique Peña Nieto, debido a que las reformas estructurales de su gobierno, principalmente en el sector de energía, atrajeron inversión.

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Éxodo en bolsa durante gobierno de AMLO

Otro de los grandes problemas que enfrenta el mercado local es la salida de empresas de la bolsa. Con AMLO suman 17 emisoras que han solicitado la cancelación del registro de sus acciones, cifra que solo es superada por el sexenio de Fox.

De 2000 a 2006 se deslistaron 45 empresas de la BMV, al pasar de 177 en el inicio del primer gobierno del PAN a 132 al final del sexenio.

En la administración morenista, Bio Pappel, Citigroup, Rassini, IEnova, General de Seguros, Maxcom Telecomunicaciones, Fortaleza, Elementia y Lala completaron sus procesos de desliste.

Mientras nombres como Ingeal, Himexsa, Farmacias Benavides, Bachoco, Aeroméxico, Sanborns, Monex y la filial mexicana del Banco Santander están en trámites para abandonar el mercado bursátil.

José-Oriol Bosch, director general de la BMV, dijo en un blog reciente que de 2008 a la fecha cerca de 35 empresas han abandonado el mercado, algo que atribuyó a razones tales como fusiones, adquisiciones, recompras y reestructuras.

 

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Reforma al mercado, insuficiente

Mientras el mercado se achica, las dos bolsas, en conjunto con el gremio bursátil y la Secretaría de Hacienda y Crédito Público preparan una reforma a la Ley del Mercado de Valores que busca simplificar las colocaciones de empresas.

En octubre, el subsecretario de Hacienda, Gabriel Yorio, adelantó que esta iniciativa está cerca de presentarse al Congreso y que tuvo el visto bueno del presidente López Obrador.

Sin embargo, para los analistas consultados esta propuesta puede ayudar, pero es insuficiente para lograr mejorar las condiciones del mercado, pues no contempla aspectos como aumentar la deducibilidad o más incentivos fiscales.

“Se tienen que alinear los objetivos por parte del gobierno, las empresas y todos los jugadores para impulsar al mercado, entender que es una forma para obtener financiamiento, crecer y crear empleos, para impulsar el crecimiento del país”, dijo González.

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