Tres ciudades de la costa atlántica francesa volverán a cerrar sus playas solo unos días después de su reapertura, debido a que la gente no ha respetado el debido distanciamiento físico, anunciaron este miércoles las autoridades locales.

Alcaldes de varias ciudades pidieron cerrar sus playas a partir del miércoles por la noche debido a que se constataron comportamientos inaceptables el fin de semana pasado,

dijo la prefectura de Morbihan, en el noroeste de Francia.

Muchas personas, por ejemplo, no guardaban una distancia de seguridad o se mantenían estáticas, sentadas o tumbadas, algo que está prohibido, añadió la prefectura bretona.

Estas localidades costeras temían que sus playas abiertas atrajeran a visitantes de otras regiones este fin de semana, ya que el jueves es festivo en Francia y muchos habitantes harán puente.

Tras permanecer cerradas durante casi dos meses para luchar contra la epidemia del coronavirus, cientos de playas francesas reabrieron el fin de semana pasado para quienes deseen bañarse, pasear o realizar deporte en solitario.

No obstante, está prohibido permanecer inmóvil en la playa, tomando el sol por ejemplo, y tampoco se autorizan las reuniones de más de 10 personas, las celebraciones o el consumo de alcohol.

Con más de 28,000 muertos, Francia es uno de los países más golpeados del mundo por el nuevo coronavirus. Pero tras registrar un retroceso en el número de decesos diarios y de pacientes graves, las autoridades decidieron levantar parcialmente el confinamiento el pasado 11 de mayo.

Apuesta catalana

En tanto, Barcelona abrió sus playas y parques para realizar paseos, en una ligera flexibilización del confinamiento en la ciudad de España, fuertemente golpeada por el coronavirus.

Las playas de esta turística ciudad ya estaban disponibles para la práctica deportiva por las mañanas, pero a partir de esta jornada quedan abiertas desde las 06:00 hasta las 20:00 horas para los paseos por la arena.

Además, abrieron parques que todavía permanecían cerrados, como el Park Güell, diseñado por el famoso arquitecto catalán Antoni Gaudí.

Disfrutemos de la playa de manera responsable. Recordemos que no está permitido el baño recreativo, tomar el sol en la arena, ni hacer deporte en grupo,

tuiteó la policía de la ciudad.

De todas maneras, un periodista de AFP observó que mucha gente hacía caso omiso de estas indicaciones, con parejas tumbadas al sol o tomando un café en la arena, mientras la poca policía que patrullaba por la zona no intervenía.

Cada cierto tiempo sonaba por los altavoces instalados en la playa un mensaje que recordaba que “no está permitido el baño recreativo o quedarse en la arena tomando el sol”.

“Hacía dos meses que no veía el mar y le he dicho a una compañera de ir un momento a ver el mar antes de ir a trabajar”, cuenta Helena Prades, una psicóloga de 43 años sentada en la arena con una compañera de trabajo, ambas con mascarilla.

“Escuchar el sonido de las olas, pasear un poco por la playa, teníamos muchas ganas”, agrega.

Barcelona y Madrid, así como partes de Castilla y León, región al norte de la capital española, las zonas más golpeadas por la pandemia del coronavirus, no han comenzado todavía la desescalada del confinamiento, instaurado el 14 de marzo.

Un 70% de los españoles sí lo han hecho.

España, que contabiliza más de 27,000 muertos, lleva adelante un proceso de desmontaje de uno de los confinamientos más estrictos del mundo. Se espera que termine hacia finales de junio.

Con información de AFP