Analistas del Deutsche Bank estiman que los costos comerciales entre el Reino Unido y la Unión Europea y los riesgos derivados del Brexit serán altos, incluso si las dos partes llegaran a un acuerdo antes de fin de año, debido al impacto de las barreras no arancelarias.

“Los aranceles representan sólo una pequeña parte del costo comercial directo de salir de la Unión Europea”, escribieron los analistas en una nota.

“Más importante es la prevalencia de las barreras no arancelarias. Estas afectarán el comercio, independientemente de si el Reino Unido y la UE comercian en términos preferenciales o no”, dijeron.

Deutsche Bank espera que Reino Unido consiga un acuerdo comercial al estilo de Canadá con el bloque en las próximas semanas, lo que se conoce como Tratado de Libre Comercio (TLC).

Tal acuerdo reduciría 0.6% el producto interno bruto (PIB) del Reino Unido con un costo de 0.2% para el PIB de la UE, dijeron los analistas.

Malta, Luxemburgo e Irlanda serán los más afectados en Europa por los costos del Brexit, mientras que “las cuatro grandes economías de la zona euro enfrentarán costos por debajo del promedio”, dijeron.

Sin embargo, “mientras que en cualquier otro año el impacto comercial del Brexit probablemente resultaría en una contracción anual, esperamos que tanto la economía del Reino Unido como la de la UE crezcan el próximo año, con o sin acuerdo”, dijeron los analistas.

Eso se debe a que los costos comerciales “son pequeños en comparación con el repunte esperado de la recuperación económica asociada con el fin del confinamiento”, dijeron

Vuelven a las mesas de negociación por Brexit

Reino Unido y la Unión Europea lograron progresos en las negociaciones sobre un acuerdo comercial de último minuto que evitaría un final tumultuoso a una crisis por el Brexit que dura ya cuatro años, aunque la pesca sigue siendo el principal punto de fricción.

Londres abandonó la UE en enero, pero ambas partes intentan sellar un acuerdo que ordene cerca de un billón de dólares en comercio anual antes de que la membresía informal -conocida como periodo de transición- termine el 31 de diciembre.

“Tenemos negociaciones intensas con la UE, hemos logrado progresos reales”, dijo la secretaria de Comercio, Liz Truss. “Estamos logrando buenos progresos en las negociaciones, pero si la UE no está preparada para forjar un acuerdo que permita al Reino Unido mantener su soberanía, entonces tendremos términos como los de Australia, y creo que es razonable”.

Tras las amenazas británicas de que rebajaría el tratado de divorcio de 2020 y de que el primer ministro Boris Johnson rompiera brevemente las conversaciones el viernes, la UE ha dicho que está lista para hablar sobre proyectos de textos legales sobre un pacto.

Los jefes negociadores de Londres y Bruselas, David Frost y Michel Barnier, se reunieron el viernes para mantener negociaciones intensivas.

Tras lograr algunos progresos en las garantías sobre competencia, incluidas las reglas sobre ayuda estatal, el principal escollo sigue siendo la pesca: Johnson insiste en retomar el control sobre sus aguas, mientras que la UE quiere acceso a las aguas pesqueras.