Estados Unidos superó este miércoles las 250,000 muertes por coronavirus, mientras Nueva York anunció que volverá a cerrar las escuelas públicas para contener una segunda oleada y en Europa la tasa de mortalidad aumenta.
Estados Unidos alcanzó el miércoles la cifra de 250,000 muertos por covid-19 desde el inicio de la pandemia, según el recuento de la Universidad Johns Hopkins.
El país, que tuvo más de un millón de nuevos casos la semana pasada, es el más afectado del mundo por el virus, por delante de Brasil e India.
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A falta de una estrategia nacional, estados y ciudades estadounidenses han impuesto diversas restricciones que van desde el confinamiento hasta la prohibición de reuniones sociales o comer dentro de restaurantes.
El cierre de las escuelas en Nueva York golpea el ánimo de los estadounidenses que se había visto impulsado por el alentador anuncio de los laboratorios estadounidense Pfizer y alemán BioNTech de que su vacuna contra el covid-19 tiene una eficacia de 95%, similar a la de su competidor Moderna (94.5%).
Esta cifra es mejor que los resultados parciales publicados la semana pasada y que mostraban “más del 90%” de efectividad.
En Nueva York, no obstante, el alcalde Bill de Blasio dijo que las 1,800 escuelas públicas de la ciudad ofrecerán clases solamente en línea desde este jueves por un plazo indefinido, porque la tasa de pruebas positivas superó el promedio de 3% durante siete días.
“Debemos luchar contra la segunda ola”, afirmó.
El subdirector de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), Jarbas Barbosa, alertó sobre el récord de hospitalizaciones por COVID-19 en Estados Unidos, de casi 77,000.
“Ya sabemos que cuando nuestras instalaciones de salud están abrumadas, se limita nuestra capacidad para tratar a quienes están gravemente enfermos”, señaló.
Las vacunas no son una solución mágica, y los países deberán “subir la cuesta” por el momento sin ellas, advirtió por su lado el director de emergencias de la Organización Mundial de la Salud, Michael Ryan.
“Creo que deberemos esperar entre cuatro y seis meses” para poder alcanzar “un nivel significativo de vacunación”, señaló Ryan en una sesión de divulgación en redes sociales.
Pese a las restricciones, el mundo ha registrado hasta ahora 56.1 millones de casos de COVID-19, con más de 1.3 millones de muertes, según Johns Hopkins.
Mortalidad en Europa
Aunque la tasa de infección en Europa ha caído, la OMS dijo que la mortalidad aumentó 18% la semana pasada, en relación a la anterior.
El 46% de los nuevos casos en el mundo y el 49% de las muertes la semana pasada tuvieron lugar en Europa, precisó.
Europa es la región con más casos del virus del mundo, más de 15 millones según un recuento de la AFP, aunque Latinoamérica y el Caribe es la que registra más muertes: más de 426,000 decesos en un total de 12.1 millones de infectados.
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La pandemia parece fuera de control en varios lugares, como en el sur de Italia, por ejemplo, donde amenaza con saturar el sistema sanitario. O en Suiza, donde una asociación médica advirtió que las unidades de cuidados intensivos están casi saturadas.
Las limitaciones a la circulación, el comercio y la restauración no son aceptadas con facilidad en todas partes.
En Berlín, la policía alemana recurrió el miércoles a cañones de agua para dispersar una manifestación de opositores a las medidas restrictivas. Los manifestantes dijeron que las medidas les recordaban la era nazi y gritaban “¡Vergüenza, vergüenza!”.
La protesta tuvo lugar un día después de choques con la policía en Bratislava, la capital de Eslovaquia, a la cual asistieron manifestantes de extrema derecha.
En Brasil, segundo país con más muertes por coronavirus (166,699 decesos) detrás de Estados Unidos, se registra un incremento de hospitalizaciones que despierta temores de una segunda ola como la que golpea a Europa y Estados Unidos.
El promedio de muertos, que había superado los mil por día entre junio y agosto, cayó por debajo de los 350 a inicios de la semana pasada. Pero desde el sábado superó de nuevo los 500.
El estado de Sao Paulo, el más poblado y con mayor número de casos y de muertos, tuvo la semana pasada un alza de 18% en las hospitalizaciones.