El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, aseguró este viernes que la próxima semana cerraría la frontera sur si México no detiene la inmigración ilegal en los Estados Unidos.
A través de su cuenta de Twitter -como es su costumbre- Trump no explicó con detalle lo que significaría el cierre fronterizo, aunque es la primera vez que le pone una fecha a su amenaza y sí dijo que podría detener “todo el comercio” entre los dos países.
Una vez más Trump culpó a México por el creciente flujo de “ilegales” que ingresaron a los Estados Unidos y sacó a relucir las recientes caravanas de migrantes sudamericanos que pasaron por México.
“Si no los detienen, estamos cerrando la frontera”, dijo Trump en un evento en Florida. “Lo cerraremos. Y lo mantendremos cerrado por mucho tiempo. No estoy jugando juegos México tiene que pararlo ”.
Tras los tuits, el presidente Andrés Manuel López Obrador reiteró su apertura a la negociación.
“Vamos a ayudar, a colaborar. Queremos tener una buena relación con el gobierno de los Estados Unidos. No vamos a discutir sobre estos temas “, dijo en su conferencia de prensa matutina
Sin embargo, el canciller mexicano, Marcelo Ebrard, sí respondió.
México no actúa con base en amenazas.Somos un gran vecino. Díganlo si no el millón y medio de estadounidenses que eligieron a nuestro país como hogar, la más grande comunidad de ese origen fuera de EU. Para ellos también somos el mejor vecino que pudieron tener.
— Marcelo Ebrard C. (@m_ebrard) 29 de marzo de 2019
Los comentarios de Trump se produjeron a dos días de que el principal funcionario de la frontera de los Estados Unidos advirtió que el sistema de control de inmigración de Estados Unidos se encuentra en un “punto de ruptura”.
Funcionarios del Departamento de Seguridad Nacional advirtieron de que el comercio con México, el tercer socio comercial de Estados Unidos, podría desacelerarse por el desplazamiento de 750 trabajadores fronterizos desde los puertos de entrada para ayudar a procesar solicitudes de asilo.
“No se equivoquen: los estadounidenses podrían sentir los efectos de esta emergencia”, dijo la secretaria de Seguridad Nacional, Kirstjen Nielsen, en un comunicado.
Un cierre fronterizo interrumpiría el turismo y el comercio entre los vecinos, que alcanzó a 612,000 millones de dólares el año pasado, según la Oficina del Censo de los Estados Unidos.
El cierre del acceso a extranjeros con visas de viaje provocaría el mismo tipo de escrutinio legal que la prohibición de Trump para las personas que ingresan a los Estados Unidos desde ciertos países de mayoría musulmana, señaló el Wall Street Journal.
Con información de Reuters