Los gobiernos de Canadá y China respondieron a los aranceles que entraron en vigor a primera hora este martes, y que dieron inicio a una nueva guerra comercial entre Estados Unidos y sus principales socios comerciales.
Las medidas arancelarias, que podrían poner en peligro casi 2.2 billones de dólares de comercio bilateral anual, entraron en vigor a las 12:01 horas (tiempo de Ciudad de México), después de que el presidente Donald Trump dijera que los países no habían hecho lo suficiente para detener el flujo de fentanilo.
En un comunicado, el gobierno de China respondió con aranceles adicionales de entre el 10 y el 15% sobre ciertas importaciones estadounidenses a partir del 10 de marzo, así como una serie de nuevas restricciones a empresas norteamericanas.
Los aranceles de China se dirigen a una amplia gama de productos agrícolas, entre ellos determinadas carnes, cereales, algodón, frutas, verduras y productos lácteos.
El gobierno de Xi Jinping también añadió a 15 entidades estadounidenses a su lista de control de exportaciones y 10 más a su lista de entidades no fiables.
Durante el primer mandato de Trump, los agricultores de Estados Unidos se vieron fuertemente afectados por las guerras comerciales, que costaron unos 27,000 millones de dólares en ventas de exportación perdidas y cedieron cuota del mercado chino a Brasil.
Se intensifica la guerra comercial con China
Trump anunció el lunes un arancel adicional del 10% sobre los productos chinos, que se suma a un impuesto del 10% previamente establecido para castigar a Pekín por la crisis de sobredosis de fentanilo en Estados Unidos.
El arancel acumulado del 20% también se suma a las tarifas de hasta el 25% impuestos por Trump durante su primer mandato a importaciones estadounidenses por valor de unos 370,000 millones de dólares.
La administración del expresidente Joe Biden ya había duplicado los aranceles sobre los semiconductores chinos hasta el 50%, y aplicó tarifas sobre los vehículos eléctricos chinos de más del 100%.
El nuevo arancel del 20% se aplicará a varias de las principales importaciones estadounidenses de electrónica de consumo procedentes de China, que hasta ahora no se habían visto afectadas por aranceles anteriores, como teléfonos inteligentes, computadores portátiles, consolas de videojuegos, relojes inteligentes y altavoces y dispositivos Bluetooth.
Respuesta de Canadá a los aranceles
Unas horas antes, el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, dijo que Ottawa respondería con aranceles inmediatos del 25% sobre importaciones estadounidenses por valor de 30,000 millones de dólares canadienses (20,700 millones de dólares estadounidenses), y otros 125,000 millones de dólares canadienses (86,200 millones de dólares estadounidenses) si los aranceles de Trump seguían vigentes en 21 días.
Anteriormente, Trudeau dijo que Canadá pondría en su lista negra la cerveza, el vino, el “bourbon”, los electrodomésticos y el jugo de naranja de Florida estadounidenses.
“Los aranceles interrumpirán una relación comercial increíblemente exitosa”, dijo el primer ministro, quien agregó que violarían el acuerdo de libre comercio entre Estados Unidos, México y Canadá firmado por Trump durante su primer mandato.
Con información de Reuters
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