China adoptó este lunes medidas de represalia contra tres congresistas estadounidenses y un alto responsable del Departamento de Estado en repuesta a las sanciones de Washington por la situación de la minoría uigur en Xinjiang.

Estados Unidos anunció el jueves que rechazaría los visados a tres importantes responsables chinos acusados de haber orquestado la represión contra musulmanes uigures en esta gran región del noroeste de China.

Esta vez, los estadounidenses objeto de sanciones son tres legisladores muy críticos con China, los senadores Marco Rubio y Ted Cruz y el congresista Chris Smith, así como el embajador Sam Brownback, defensor de libertades religiosas.

“El Partido Comunista chino me ha prohibido la entrada al país. ¿Supongo que no les agrado?”, publicó Rubio en su cuenta de Twitter.

“Lástima. Iba a llevar a mi familia a Pekín para unas vacaciones de verano, justo después de visitar Terán”, ironizó Cruz.

La decisión de Pekín se produce “en respuesta a las equivocadas acciones de Estados Unidos” aseguro una portavoz del ministerio chino de Exteriores, Hua Chunying.

“Instamos a Estados Unidos a retirar sus equivocadas acciones, y abstenerse de palabras y acciones que interfieren y dañan los asuntos internos de China”, agregó.

Entre las personas sancionadas por Estados Unidos figura Chen Quanguo, principal responsable del Partido Comunista Chino en Xinjiang. Es considerado el arquitecto de la política de seguridad de Pekín en la región.

Esta región semidesértica de unos 25 millones de habitantes ha sido escenario de atentados atribuidos por Pekín a separatistas o a islamistas. Recientemente el gobierno chino ha impuesto en la región severas medidas de seguridad.

Más de un millón de musulmanes, especialmente uigures, han sido o son internados en campos del Xinjiang, según Estados Unidos y organizaciones de derechos humanos.