El plan para darle un nuevo rumbo a la economía de Argentina ya es una realidad.
La Cámara de Diputados de Argentina aprobó este viernes un proyecto de ley que dispone una alza de impuestos para enfrentar la grave crisis que sufre ese país.
Con 134 votos a favor y 110 en contra, se logró la aprobación del proyecto de ley titulado ‘Ley solidaridad social y reactivación productiva en el marco de la emergencia pública’ que apenas fue enviado el martes al Congreso.
El proyecto de ley tiene como objetivo subir impuestos a las exportaciones agrícolas y a la compra de divisas en busca de financiar un mayor gasto social para lidiar con la crisis económica que atraviesa el país.
Posteriormente, tras un debate de 12 horas, el Senado aprobó la propuesta con 41 votos a favor, 23 en contra y una abstención.
Las medidas del titular del ejecutivo buscan mantener el equilibrio fiscal y expandir el gasto social para combatir una pobreza de 35.4%, generada en gran parte por una inflación que en octubre llegó a 42.2% anual.
Todas estas medidas están pensadas como parte de un programa integral, están todas interconectadas, estamos teniendo mucho cuidado en resolver todos los desequilibrios,
señaló Martín Guzmán, ministro de Economía y discípulo del Nobel de Economía Joseph Stiglitz.
¿Qué propone?
El proyecto propone subir del 30% al 33% la tasa que grava las exportaciones de granos de soja y del 12% al 15% la que grava al maíz y el trigo, que son los tres principales cultivos de un país que es una de las mayores potencias agrícolas del mundo.
Además, Guzmán dijo que el proyecto prevé aplicar un impuesto del 30% a la compra de divisas, incluidos los 200 dólares mensuales que puede comprar cada persona, según el cupo actual, y que gravarán activos financieros en el exterior.
La iniciativa se tomó en medio de las negociaciones iniciadas por el gobierno para reestructurar una deuda pública cercana a 100,000 millones de dólares con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y con acreedores privados, que la gestión de Fernández considera imposible de pagar actualmente.
Es un mensaje muy claro de cuidar los dólares, de mandar un gesto hacia los acreedores de que hay voluntad de recaudar, de evitar que los dólares se vayan por diferentes vías,
dijo a Reuters el economista Pablo Besmedrisnik, director de la consultora Invenómica.
Por otro lado, los ajustes jubilatorios previstos por ley y los de tarifas de servicios públicos -que fueron uno de los principales impulsores de la inflación en los últimos años- serán suspendidos por seis meses, según el ministro, hasta diseñar un nuevo mecanismo de indexación por inflación.
Cuando haya una nueva fórmula, Alberto Fernández dará aumentos por decreto a los jubilados, pensionados y beneficiarios de Asignación Universal por Hijo (AUH), según el diario Clarín.
El gobierno anunció, además, un pago extraordinario a fin de año para jubilados y quienes reciban subsidios a la pobreza.
Se espera que el proyecto sea aprobado sin grandes discusiones por el Congreso, donde el gobierno cuenta con mayoría -gracias al apoyo de legisladores aliados en Diputados- en ambas cámaras.
Con información de Reuters