El número de personas que trabaja en la informalidad en México se ubicó por primera vez por encima de las 30 millones de personas en marzo, nivel que no se observaba desde el mismo mes del año pasado, que marcó el inicio de la crisis económica por el COVID-19 en el país.

De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), tan solo de febrero a marzo se agregaron 1.2 millones de personas a este sector de la economía, para totalizar 30.6 millones de personas, señal de la apertura de la economía y menos restricciones a la movilidad ante el bajo número de contagios de coronavirus.

La tasa de informalidad laboral se ubicó en 56.8% en marzo, proporción de los que actualmente están ocupados. 

“La tasa de informalidad laboral comprende a los ocupados que son laboralmente vulnerables por la naturaleza de la unidad económica para la que trabajan, así como aquellos cuyo vínculo o dependencia laboral no es reconocido por su fuente de trabajo,” según el Inegi.

Por género, la tasa de informalidad en hombres fue de 57.4%, mayor en 2.2 puntos porcentuales respecto a marzo del año pasado, y en mujeres fue de 55.9%, inferior en 0.6 puntos porcentuales en su comparación anual.

Sobre este tema, la OCDE apuntó que México requiere una estrategia para reducir la informalidad.

Se necesita una estrategia integral para combatir la informalidad para asegurar que la recuperación genere trabajos formales, lo que contribuiría a la inclusión y a aumentar las rentas públicas a mediano plazo,

dijo el organismo en su documento titulado Reformas de Política Económica 2021

La generación de empleo formal en marzo fue de 88,771 plazas y para el primer trimestre se crearon 251,977 puestos de trabajo.

Otros indicadores 

En otro indicador del mercado laboral mexicano, la población subocupada fue de 7.1 millones de personas, equivalente a 13.2% de los ocupados. En febrero, la tasa de subocupación fue de 13.9%. 

Los trabajadores subocupados son aquellos que, a pesar de trabajar, tienen la necesidad y disponibilidad de ofertar más tiempo de trabajo.

Mientras que la tasa de desempleo se redujo a 3.9%, equivalente a 2.2 millones de personas. En el segundo mes del año, la tasa de desocupación fue de 4.4%.

El instituto a cargo de Julio Santaella precisó que la población ocupada se situó en 53.8 millones en marzo, cifra inferior en dos millones de personas en comparación con el año pasado. 

Sobre la población económicamente activa (PEA), se observó una disminución de 1.5 millones de personas, al pasar de 57.4 millones en marzo del año pasado a 56 millones. 

“De los 12 millones de personas que salieron de la PEA en abril de 2020 por el tema de pandemia, la recuperación es de alrededor de 10.6 millones para el tercer mes de 2021”, indicó el Inegi.