La situación que enfrenta el Valle de México en materia de contingencia ambiental obedece a dos factores: el principal es la refinería de Tula y el segundo tiene que ver con el parque vehicular de la región, consideró la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) de la capital del país.

Este jueves, el sector empresarial capitalino publicó un posicionamiento sobre la contingencia ambiental atmosférica por ozono y la ola de calor extremo que afectan a la Zona Metropolitana del Valle de México.

Para los empresarios, estos fenómenos no “solo representan un riesgo inmediato para la salud de los ciudadanos, sino que también amenazan el desarrollo de la vida cotidiana de la capital del país y la competitividad y eficiencia de las empresas”.

A partir de ahí, la asociación empresarial señaló que como primera causa de la situación que enfrenta la región está la refinería de Tula en Hidalgo, ya que continúa utilizando combustóleo. 

Es responsable de una parte considerable de la contaminación. Proponemos su conversión a gas natural, una solución viable que podría mejorar significativamente la calidad del aire para los habitantes de la capital del país

informó la Coparmex local.

A esto se suma que especialistas en el sector, como el consultor de energía Víctor Ramírez, que han subrayado la necesidad de revisar las operaciones de este complejo que está cerca del Valle de México, debido a las emisiones que ha estado generando en los últimos días.

 

Sobre el segundo posible factor que está causando la contaminación en la región, el sector empresarial capitalino explicó que el parque vehicular contribuye a la contaminación del aire porque no se ha aplicado de manera óptima el programa Hoy No Circula.

Aunque bienintencionado, ha demostrado ser insuficiente e incluso ineficiente. Se requiere reestructurar de fondo dicho programa

sentenció.

CAMe aplica restricciones a Tula 

Previo a este posicionamiento por parte de la Coparmex, la Comisión Ambiental de la Megalópolis (CAMe) expuso que la Refinería “Miguel Hidalgo” de Tula no operará a más del 75% de capacidad del total por la contingencia ambiental.

Esta central tiene que disminuir la capacidad de combustión en calentadores a fuego directo y calderas en plantas de proceso y fuerza.

También se tiene que implementar la “reducción del 30% del consumo de combustóleo en la Central Termoeléctrica Francisco Pérez Ríos en Tula, Hidalgo”.

La situación de contaminación también se da en un escenario en el que la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales en 2016 señaló que la Cuenca Atmosférica de Tula (CAT) es la mayor generadora de contaminantes en Hidalgo, ya que aporta el 97 % del dióxido de azufre (SO2).

“La cuenca atmosférica de Tula, integrada por 12 municipios, cuenta con 58 empresas locales y federales, es sede de una refinería, dos plantas de generación eléctrica”, subraya el estudio Calidad del Aire en la Cuenca Atmosférica de Tula.

Propuestas estructurales desde la Coparmex Ciudad de México 

La Coparmex Ciudad de México, presidida por Armando Zúñiga Salinas, propone tres acciones para resarcir el impacto ambiental que hay: la primera propuesta se centra en una reforma profunda e integral al Sistema de Transporte Público.

Dicha iniciativa incluye aumentar la cobertura de Metro, Metrobús y otros sistemas de transporte masivo; modernizar la flota de transporte con vehículos eléctricos y tecnologías limpias, así como crear un sistema integrado de transbordos, incluyendo bicicletas y transporte compartido.

La segunda propuesta busca aumentar la tasa de utilización de vehículos eléctricos e híbridos, mientras que el tercer planteamiento pretende promover el cambio hacia fuentes de energía renovables en el sector empresarial, instituciones de gobierno y universidades, así como incentivar la instalación de paneles solares.

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