El fenómeno de relocalización, conocido como nearshoring, es una oportunidad “increíble” para México debido a que se vislumbra el fin de la globalización, dijo el premio Nobel de Economía, James A. Robinson.

En el Encuentro Amafore 2024, el economista y politólogo británico explicó que el mundo está experimentando la desglobalización. Esto traería algunas desventajas, como el incremento de precios en algunos países de América Latina; pero también representa oportunidades debido a la relocalización de las cadenas de suministro.

Creo que para muchas partes del mundo tendrá efectos económicos negativos: el crecimiento disminuirá o se ralentizará, al menos; pero México se encuentra en una posición en la que puede beneficiarse de esa reconfiguración del comercio

dijo el economista. 

El experto igualmente declaró que la “desglobalización” perjudicará a otras economías como China o Rusia, pero la situación geográfica de México provocará beneficios por nearshoring y friendshoring. Adicionalmente, dijo que el país aprovecha su cultura al crear un “suelo común”, lo que no se ve en otros países de América Latina.

Concentración de poder en China no es positiva

Robinson también expresó la importancia de los contrapesos en los sistemas políticos y económicos. “El poder absoluto corrompe: no podemos tener sociedades o economías emprendedoras y exitosas con una dictadura totalitaria”, apuntó.

Según dijo el Nobel de Economía, cuando los gobiernos suelen reprender los proyectos de innovación, entonces los emprendedores prefieren no efectuarlos. Ejemplificó que el progreso de China es real, pero podría no perdurar debido a que hay una concentración de poder personal en el presidente Xi Jinping.

No creo que el dinamismo económico chino sea sostenible. Si pensamos cómo será el mundo en 20 años, será bastante similar en el dominio económico de Estados Unidos

añadió el experto. 

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