Es muy probable que ocurra un cambio hacia una perspectiva negativa en la calificación soberana de México durante 2025. Esto sucedería en el gobierno de Claudia Sheinbaum ante dudas sobre las reformas constitucionales aprobadas y la resolución que se dé al Presupuesto de Egresos de la Federación 2025, de acuerdo con Integralia.
En conferencia, el consultor de riesgo político y económico/socio y codirector de la consultora de asuntos públicos, Carlos Ramírez, explicó que al menos dos calificadoras podrían cambiar la perspectiva de la calificación soberana de México durante el próximo año, pero no necesariamente se verían reducciones de manera inmediata.
Los ingresos son inciertos, el gasto sigue creciendo y vienen más programas sociales de panorama complicado. Creo que la perspectiva negativa el próximo año es muy probable que ocurra. No va a ser una decisión pronta de las calificadoras ni una reducción inmediata, será un proceso
indicó el experto.
De acuerdo con Ramírez, el gobierno de Claudia Sheinbaum obtendría presiones de las reformas constitucionales contenidas en el ‘Plan C’, especialmente de la del Poder Judicial. Además, tiene el pendiente de “entregar un presupuesto creíble”, con lo que las calificadoras le “darían el beneficio de la duda”.
No obstante, se visualiza un panorama complicado con la desaceleración económica y las expectativas de una recaudación más limitada por el poco margen de maniobra con impuestos como el IEPS.
Tendencias de gasto no son sostenibles a mediano plazo
Ramírez agregó que las tendencias de gasto que mantienen la administración no son sostenibles a mediano plazo. Por ello, no descarta que el gobierno tenga que reaccionar con una reforma fiscal el próximo año, pero esta llegaría en un momento con vulnerabilidad debido al contexto político-económico regional.
El experto puntualizó que la consolidación fiscal es un reto en el panorama actual, debido a que se cuenta con poco espacio para aumentar la recaudación y, además, el gobierno de Claudia Sheinbaum ha propuesto nuevos gastos para los primeros años del sexenio.
Adicionalmente, identificó que el manejo fiscal y dubitativo de Petróleos Mexicanos (Pemex) será un punto a seguir para la próxima administración.
Por ello, mencionó que las decisiones que se tomen en los primeros 100 días de gobierno serán claves para definir los siguientes pasos de la próxima presidencia. Aunque, de primera mano, se prevé que sea un gobierno “más técnico y pragmático” respecto al actual.
Poder Judicial mantenía sistema imperfecto, pero predecible
El especialista de Integralia recalcó que la reforma al Poder Judicial trae preocupación a las empresas principalmente por los efectos desestabilizadores que brindará a las garantías de las inversiones. De igual modo, señaló que esto permitirá transitar a un sistema politizado e impredecible.
Sin los límites que establecía el Poder Judicial en términos jurídicos, es transitar de un sistema imperfecto pero predecible –con 30 años de historia– a un politizado e impredecible
dijo el analista político.
Esto se traduciría en un sesgo a favor del gobierno en los procesos judiciales. Según dijo, esto sería un riesgo por la concentración de poder y provocaría una menor especialización de las personas juzgadoras, lo que agrega incertidumbre al panorama local.
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