Los eventos disruptivos de los últimos tres años, particularmente la pandemia de COVID-19 y sus consecuencias, han permeado en la vida y los puntos de vista de los millennials y la generación Z, que han adoptado nuevos hábitos sobre todo en temas relacionados con el trabajo.
De acuerdo con información de la Encuesta 2023 de gen Z y millennials de Deloitte, estas generaciones se esfuerzan por lograr un mayor equilibrio entre el trabajo y su vida personal, y están impulsando valores relacionados con el medio ambiente, el estado del mundo y el futuro que ven desarrollarse ante ellos, por lo que buscan empleadores que les permitan empoderarse para marcar la diferencia.
La pandemia provocó que los jóvenes se replantearan el papel que juega el trabajo en sus vidas. De acuerdo con la encuesta de Deloitte la mitad de los entrevistados de la gen Z y la mayoría de los millennials afirman que su empleo sigue siendo fundamental en el desarrollo de sus identidades.
Estas generaciones desean flexibilidad respecto a dónde y cuándo trabajar, por lo que muchos encuestados ahora buscan modelos de trabajo híbridos o remotos, un beneficio que valoran profundamente.
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El costo de vida, la principal preocupación
Seis de cada 10 personas de la gen Z y dos tercios de los millennials piensan que la economía empeorará en su país durante el próximo año y muchos consideran que esto hará más complicado pedir un aumento o promoción, conseguir un nuevo empleo o buscar mayor flexibilidad en el trabajo.
Sus preocupaciones económicas están afectando la capacidad para planificar su futuro a nivel personal y muchos afirman que será más complicado o imposible comprar una casa o formar una familia.
La generación Z y los millennials siguen citando el costo de vida como su principal preocupación social, por encima del desempleo y el cambio climático. Más de la mitad de la generación Z (51%) y los millennials (52%) dicen que viven de cheque en cheque (5 puntos porcentuales más que en el estudio de 2022).
Estrés y agotamiento pone a prueba a estas generaciones
Casi la mitad de la gen Z y cuatro de cada 10 millennials comentan sentirse estresados por todo o la mayor parte del tiempo, y los niveles de estrés aumentan entre las mujeres, entrevistados LGBT+, minorías étnicas y personas con discapacidades.
Preocupaciones por las finanzas personales, el bienestar de amigos y familiares, el equilibrio entre trabajo y vida personal y pesadas cargas de trabajo contribuyen en los niveles de estrés de estas generaciones.
Las redes sociales también afectan su bienestar, lo que hace que se sientan fuera de lugar, sin embargo, aseguran que el acceso a la salud mental se ha vuelto más fácil gracias a las redes sociales.
