Durante el inicio del último trimestre del presente año, la economía mexicana se encuentra a un pequeño paso de transitar de una fase de desaceleración a una etapa de recesión.

Los vientos en contra son la debilidad manufacturera, el pesimismo empresarial para invertir, la depreciación del peso frente al dólar y la incertidumbre en el mercado bursátil en México.

El Indicador Adelantado llegó a 100 puntos en octubre de 2024, colocándose en el límite inferior de su tendencia de largo plazo (100 puntos), de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

Además, con dicho nivel, el indicador –que busca anticipar los puntos de giro del estado general de la economía (ciclos económicos)– cayó 0.11 puntos, hilando seis meses con bajas.

Cabe recordar que por si el indicador se ubica por debajo de los 100 puntos y con una tendencia de disminuciones en su valor, se interpreta que el ciclo de la economía nacional es una fase recesiva.

Los vientos en contra del Indicador Adelantado son la debilidad manufacturera, el pesimismo empresarial para invertir, la depreciación del peso y la incertidumbre en el mercado bursátil local
Los vientos en contra del Indicador Adelantado son la debilidad manufacturera, el pesimismo empresarial para invertir, la depreciación del peso y la incertidumbre en el mercado bursátil local Fotoarte: EL CEO

Los factores de la recesión

De los seis componentes del Indicador Adelantado, cuatro fueron factores negativos para la economía de México: empleo en manufactura, momento adecuado para invertir, índice de precios y cotizaciones (IPC) de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) en términos reales y el tipo de cambio real.

En el primer caso, se registró una baja mensual de 0.04 puntos en octubre, la cuarta disminución seguida, que responde a la debilidad de la industria norteamericana, principal demandante de la manufactura nacional.

Por su parte, el indicador del momento adecuado para invertir retrocedió 0.14 puntos, siendo la novena variación negativa al hilo, que deriva de la incertidumbre empresarial por las elecciones en Estados Unidos y el primer mes transcurrido del gobierno de Claudia Sheinbaum.

Para el IPC de la BMV, la caída, que fue la octava, ascendió a 0.12 puntos, manifestando también cautela de los mercados; mientras el índice sobre el tipo de cambio creció, por noveno mes, 0.39 puntos, pero su comportamiento es inverso al de la actividad económica, es decir, el peso se depreció frente a dólar.

Motores, insuficientes

Los motores del Indicador Adelantado en octubre fueron los correspondientes al mercado bursátil de la Unión Americana y a la tasa de interés, según el Sistema de Indicadores Cíclicos del INEGI.

El componente del Índice S&P 500 aumentó 0.14 puntos, que representó hilar 22 meses con ascensos, producto de la confianza de los mercados por las vísperas en las elecciones estadounidenses.

En tanto, la tasa de interés interbancaria de equilibrio (TIIE) disminuyó, por decimoctava vez, 0.14 puntos, pero su comportamiento es como el del tipo de cambio; esto obedece a que el Banco de México redujo nuevamente el objetivo, ahora a 10.25%.

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