Una lenta recuperación y el rebote en la pandemia implican que Estados Unidos se enfrenta a meses “difíciles”, pues el potencial reparto de la vacuna aún enfrenta obstáculos de producción y distribución en masa antes de que su impacto en la economía sea claro, dijo el jefe de la Fed, Jerome Powell, este lunes.
“El alza en nuevos casos de COVID-19, tanto en Estados Unidos como en el exterior, es preocupante y podría volverse un reto para los próximos meses”, dijo Powell en un discurso preparado para una audiencia con el congreso la mañana del martes.
“Recientes noticias en el frente de la vacuna son muy positivas para el mediano plazo. Por ahora, aún hay retos importantes e incertidumbre, incluyendo los tiempos, producción y distribución, y la eficiencia en los distintos grupos. Aún es difícil calcular el tiempo y tamaño de las implicaciones económicas de estos desarrollos con cualquier grado de confianza”.
El discurso de Powell es el más detallado hasta ahora sobre al arribo de la vacuna y su influencia en las perspectivas de la Fed, así como la evolución de una recuperación cuya ralentización ha sido reconocida por la misma institución.
Esta posición podría formar opiniones sobre cuánto apoyo aún se requiere de parte del gobierno hacia las familias y negocios para sobrellevar el periodo entre la actual recesión y la economía post-pandemia.
Algunos analistas esperan un marcado rebote en la economía en los próximos meses, con los estadounidenses vacunados y una inmunidad generalizada frente al coronavirus.
Sin embargo, Powell dijo que el destino de la economía se mantiene ligado al éxito de este proceso, y hasta entonces el impacto de la pandemia se mantendrá, y afectará particularmente a mujeres, minorías y aquellos en el sector de servicios.
“Una recuperación completa es poco probable hasta que la gente tenga la confianza de que es seguro volver a realizar un rango amplio de actividades”, dijo Powell.