Países de América Latina podrían ver mejoras en sus economías una vez que los niveles de inflación han comenzado a reducir notablemente y esto favorece el poder adquisitivo de las familias, coinciden especialistas.
La inflación en América Latina ha sido un tema generalizado. Afortunadamente hemos visto que las presiones han venido relajándose y esto ha permitido observar descensos en los incrementos de precios, es decir, que se está presentando una desinflación
consideró Janneth Quiroz, subdirectora de análisis económico de Monex.
De acuerdo con el portal de estadísticas Statista, la inflación general ya tocó su nivel máximo en toda la región, pero se mantiene fuera de las metas establecidas por los bancos centrales.
La inflación en Brasil se coloca en 5.03%; en Chile la inflación disminuyó a 7.88%; en Perú este indicador descendió al 5.59%; y en Costa Rica la inflación bajó a 5.19%.
Mientras que en México, este indicador se coloca en 5.18%, según los datos más recientes del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
“La verdad es que hemos visto bastante control en la situación inflacionaria en México y yo creo que podríamos seguir viendo una desaceleración continua”, consideró Juan Carlos Cruz Tapia, especialista de la Escuela Bancaria y Comercial (EBC).
Sin embargo, otras economías de la región de América Latina registran niveles de inflación muy elevados, tal como en Argentina, con un nivel del 98.59%, y en Venezuela de 399.98%, según los datos de Statista.
La inflación en América Latina está relativamente controlada, fuera de Argentina y Venezuela
agregó Cruz Tapia.
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Por su parte, James Salazar, subdirector de análisis económico de Banco BASE, consideró que el descontrol inflacionario que han enfrentado las economías de América Latina se justifica por distintas problemáticas, tales como:
- El rompimiento en las cadenas de valor
- La lenta recuperación del consumo
- La escasez del nivel de oferta
- La guerra entre Rusia y Ucrania que provocó el aumento de precios en granos y cereales
- El aumento de los precios energéticos y sequías
“La inflación que enfrentan las economías de América Latina se justifica por temas externos, pero hay casos exitosos como Brasil, Chile y México, debido a que son países que comenzaron a subir antes las tasas de interés”, señaló Salazar.
Cesaire Chiatchoua, especialista del Instituto Politécnico Nacional (IPN), recordó que “la inflación ha traído consecuencias importantes a las economías de América Latina, tal como la reducción del poder adquisitivo, pero su trayectoria ha comenzado a tener niveles más favorable”.
Combate efectivo para la inflación
Recientemente el Banco de Pagos Internacionales (BIS, por su sigla en inglés), encabezado por Agustín Carstens, recomendó mantener activos los incrementos a las tasas de interés, debido a que las economías se encuentran en un punto crucial en la lucha para controlar la inflación.
“Todos esperamos que lo hagan, pero debemos estar preparados para afrontar los significativos riesgos que están en el camino. Entre estos riesgos, una inflación persistentemente elevada e inestabilidad financiera son los dos que más probablemente podrían desencadenar un periodo extenso de crecimiento lento o, incluso, recesión”, dijo Carstens al presentar el informe económico.
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Salazar recordó que “la política monetaria es el principal elemento que justifica que se hayan reducido las tasas de inflación”, sin embargo, los precios de los alimentos se mantienen altos en la mayoría de las economías.
Aunque están cediendo, las presiones inflacionarias todavía quedan muy lejos de los objetivos que tienen los bancos centrales
finalizó el subdirector de análisis de Banco BASE.