La industria de la construcción se ha convertido en uno de los motores económicos del país en los últimos años, debido principalmente a la apuesta federal por las obras públicas.

Sin embargo, surge la interrogativa de si dentro del gremio de los constructores de México existe preocupación por el comportamiento de los costos de los insumos de obras públicas.

El Índice Nacional de Precios Productor (INPP) considera 56 insumos de obras públicas agrupados en cuatro categorías: Materiales industrializados, Maquinaria mayor, Equipo menor y Combustibles automotores y lubricantes.

De estos 56 insumos, 46 presentaron incrementos anuales en su INPP durante septiembre del año en curso, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).

Aunque, con la terminación de los grandes proyectos del exgobierno de Andrés Manuel López Obrador se podrían corregir los costos de los insumos de obras públicas, a la espera de la fecha de ejecución del plan de infraestructura de la nueva gestión federal.

La inversión pública se mantendría acotada tras la conclusión de las obras insignia del gobierno federal, el cambio de administración (usualmente el ejercicio del gasto tiende a retrasarse al inicio de cada gobierno) y la expectativa de un proceso de consolidación fiscal

explicaron analistas de Ve por Más en una nota.

Las alzas en las obras públicas

El insumo de obras públicas con la mayor inflación anual fue el correspondiente a afinación y laminación de aluminio, misma que registró una tasa de 23.34% en septiembre de este año.

También con variaciones de doble dígito en sus costos se encontraron tubos de cobre, elevadores y montacargas, soldaduras, bombas, piezas metálicas, maquinaria y equipo especial para la construcción, asfalto y mezclas asfálticas y calderas y hornos industriales.

Por su parte, las caídas se exhibieron en tractores agrícolas, estructuras, alambres de fierro y acero, alambrón, fibracel y tablero aglomerado, varilla corrugada, perfiles de hierro y acero, diésel, triplay y gasolina.

La proyección

El Presupuesto de Egresos de la Federación del 2025 año definirá, más el comportamiento de los precios internacionales, el comportamiento de los costos de los insumos de obras públicas.

Es decir, si dentro de los gastos del gobierno federal se encuentra una gran cartera de proyectos, la demanda por más insumos presionará en los precios al productor de éstos, y viceversa.

La aprobación del Paquete Económico 2025 –que presumiblemente incluirá partidas de algunos de los proyectos de infraestructura insignia de la nueva administración, así como algunos programas sociales orientados a la construcción de vivienda– podría implicar un mayor dinamismo para la construcción

estimaron especialistas de Banorte en un documento.

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