El 2025 puede ser un año en el que los flujos de Inversión Extranjera Directa (IED) muestren un comportamiento más errático e incluso un nulo crecimiento ante las constantes amenazas de aranceles y la incertidumbre interna.
Las expectativas apuntan a un escenario de mayor incertidumbre y a pesar de que la oportunidad del nearshoring está presente, los inversionistas e instituciones financieras ven con cautela la llegada de IED.
Para este año, el consenso de analistas apunta a que la economía mexicana captará 37,000 millones de dólares (mdd) en IED, cifra que está por debajo de la expectativa de todo el 2024 por 37,127 mdd, de acuerdo con la encuesta que hace Banco de México (Banxico) a los analistas del sector privado.
A falta de todo lo que suceda este 2025, la IED no ha tenido un descenso desde 2020, cuando se desplomó 18.5% afectada por la pandemia.
Estancamiento de IED
Otro punto relevante es que, de enero a septiembre del año pasado, captaron 35,737 mdd de IED, de los cuales, solo 2,060 mdd fueron ‘nuevas inversiones’, la cifra más baja para un mismo periodo desde 2014.
El estancamiento de los flujos de inversión responde a la incertidumbre por la que atraviesa México, con advertencias desde el exterior y los efectos de la reforma judicial con la votación de jueces y magistrados, un ejercicio que genera dudas entre los inversionistas.
Un análisis de BBVA Research señala que la imposición de aranceles de hasta 10% no tendrían efectos relevantes en la economía mexicana; sin embargo, los aranceles de 25% ocasionarían una caída del PIB de 1.5%, menores niveles de inversión y mayor incertidumbre.
Dudas para invertir
Gabriela Soni, directora de Estrategias de Inversión en UBS México dijo que, si bien el país continúa posicionado como un destino estratégico para la IED, especialmente en sectores como manufactura, automotriz y tecnología, la incertidumbre generada por los aranceles de Estados Unidos provocaría que algunas empresas adopten una postura más cautelosa en el corto plazo.
Aunque los niveles de inversión siguen altos… son vulnerables al debilitamiento de la confianza empresarial debido a los cambios constitucionales en curso. Además, la política comercial estadounidense y la revisión del T-MEC en 2026 añaden otra capa de incertidumbre, lo que podría mermar la confianza y aumentar la volatilidad de los mercados financieros
dijo Soni a EL CEO.
En tanto, el director del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), José Luis Clavellina, dijo que hay incertidumbre política y económica por los aranceles; además, advirtió que “la amenaza y la revisión mes a mes de ver si se cumplen o no objetivos extraeconómicos pueden limitar la llegada de nuevas inversiones”.
También necesitamos de una adecuada infraestructura, energía, agua, mano de obra capacitada; otros elementos que impiden que crezcamos de forma acelerada son la inseguridad, falta de Estado de derecho, incertidumbre política y económica
planteó Clavellina.
Manufactura: la más afectada
Hasta el tercer trimestre del año pasado, últimas cifras disponibles, muestran que de los 35,737 mdd de IED, 19,407 mdd, equivalente al 54.3% del total, está en la industria manufacturera.
Al interior de los 19,407 mdd de IED en la manufactura, 10,198 mdd se concentran en la fabricación de equipo de transporte, donde el 74.1% es para la fabricación de automóviles y camiones.
Este sería el sector más afectado de aplicarse aranceles, por lo que la incertidumbre inyecta mayor cautela a las empresas sobre si apostar aumentar la producción en México o trasladar operaciones a Estados Unidos.
El sector automotriz sería uno de los más afectados debido a su altísima dependencia del comercio transfronterizo. Algunos componentes cruzan la frontera más de cuatro veces antes de que un vehículo esté terminado, por lo que cualquier barrera arancelaria encarece la producción y genera disrupciones en la cadena de suministro
dijo Soni.
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